Ford explora escindir negocio autos eléctricos para liberar valuación estilo Tesla

24 de feb. (Dow Jones) -- Ford Motor está buscando formas de separar su operación de vehículos eléctricos de su negocio centenario, con la esperanza de ganarse el tipo de valuación que los inversionistas dan a Tesla y otros fabricantes de vehículos 100% eléctricos.

     El director ejecutivo, Jim Farley, quiere aislar las operaciones eléctricas de Ford de su negocio de motores de combustión interna e incluso ha considerado escindir uno u otro, dijeron personas familiarizadas con el asunto. Una escisión podría generar el tipo de múltiplos de ganancias que le han dado a Tesla un valor de mercado cercano al billón de dólares.

     Pero dividir la compañía, que Ford dijo que no está planeando, puede resultar demasiado difícil, por lo que Farley podría simplemente separar el negocio de vehículos eléctricos internamente como su propia unidad, como parte de una amplia reorganización que busca darle a Ford una ventaja en la era eléctrica.

     Una escisión podría ser una venta difícil para la familia Ford. Controlan al fabricante de automóviles a través de una clase especial de acciones y temen perder influencia sobre la compañía de 118 años, dijeron las personas, que no quisieron ser identificadas al revelar deliberaciones internas. La familia fundadora, encabezada por el presidente ejecutivo Bill Ford, tiene tres puestos en la junta.

     La empresa enfrenta la presión de Wall Street para escindir su incipiente negocio de vehículos eléctricos, a fin de aumentar el valor al reducir los costos heredados y obtener un mayor acceso a los mercados de capital. Los inversores han otorgado un valor inmenso a los fabricantes de vehículos eléctricos puros, como Rivian Automotive, cuyo valor de mercado superó brevemente al de Ford a finales del año pasado, a pesar de producir relativamente pocos vehículos.

     “Estamos enfocados en nuestro plan Ford+ para transformar la compañía y prosperar en esta nueva era de vehículos eléctricos y conectados”, dijo la empresa por correo electrónico, cuando se le preguntó sobre una posible escisión. “No tenemos planes de escindir nuestro negocio de vehículos eléctricos de batería o nuestro negocio tradicional de ICE”.

     Sin embargo, a principios de este mes, Farley no rechazó la posibilidad de escindir cualquiera de las operaciones cuando se le preguntó sobre el tema durante la llamada de ganancias de la compañía.

     “Dirigir un negocio ICE exitoso y un negocio BEV exitoso no es lo mismo”, dijo Farley. “Estoy realmente entusiasmado con el compromiso de la compañía de operar los negocios como deberían ser”. El negocio de vehículos eléctricos es “fundamentalmente diferente” en los clientes que atrae, la forma en que se construyen sus productos y el talento de ingeniería y diseño que debe contratarse.

      “No estamos buscando medias tintas”, dijo Farley en la llamada. “Hemos terminado con el cambio incremental. Tenemos un plan claro, un sesgo para la acción y una mentalidad de hacer lo que sea necesario”.

     A finales del año pasado, Ford tuvo conversaciones con asesores financieros para explorar algunas opciones para la operación de vehículos eléctricos, incluida una posible reorganización y la obtención de capital privado para ello, de acuerdo con dos personas familiarizadas con el asunto.

      A medida que Farley buscaba maximizar el valor de las operaciones de vehículos eléctricos de Ford, su visión evolucionó con el tiempo, desde considerar inicialmente una escisión más pequeña, hasta contemplar una división total y ahora una división interna, dijeron las personas familiarizadas con el esfuerzo.

      Incluso una división interna sería complicada. Empalmar la ingeniería y las operaciones en un fabricante de vehículos, donde algunos ingenieros y fábricas crean y construyen ambos tipos de automóviles, no es tarea fácil, dijo una de las personas. Incluso si todos están a favor de una verdadera división, sería un trabajo pesado manejar la complejidad, dijo la persona.

     Ford ha comprometido 30 mil millones de dólares para su estrategia de vehículos eléctricos hasta 2025 y se dice que gastará entre 10 mil y 20 mil millones de dólares más hacia finales de la década, con la intención de convertir fábricas para construir modelos enchufables. Farley triplicó la producción del Mustang Mach-E eléctrico y duplicó la producción de su camioneta enchufable F-150 Lightning, que saldrá a la venta esta primavera. La compañía planea producir 600 mil unidades eléctricas anualmente en dos años y generar hasta la mitad de sus ventas a partir de vehículos que funcionan con baterías para 2030.

     En su estructura actual, el fabricante de automóviles carece de acceso a la financiación disponible para Tesla y otros fabricantes de vehículos eléctricos que son vistos más favorablemente por los bancos e inversores. La creación de un plug-in puro podría proporcionar a Ford acceso a capital más barato y dar a los inversores la oportunidad de asignar un valor a su negocio de vehículos eléctricos, dijeron las personas.

     Farley está trabajando de cerca en el esfuerzo con Doug Field, el exjefe del proyecto de automóviles de Apple, a quien Ford contrató en septiembre como jefe de tecnología avanzada, dijeron las personas. Field, quien anteriormente trabajó como ingeniero jefe de Tesla, tendría un papel importante en cualquier entidad nueva, dijeron las personas.

      Field y Farley tendrían mucho trabajo por delante si decidieran buscar un spin-off completo.

      Además de tener que ganarse a la familia fundadora, los concesionarios de automóviles y el sindicato United Auto Workers también tendrían que estar convencidos de que no se quedarían atrás.

     Los analistas han dicho que Ford necesita deshacerse de su modelo comercial heredado para lograr los márgenes de ganancias que tiene Tesla, que Farley ha estimado que superan los 10 mil dólares por automóvil. Para compensar el mayor costo de los vehículos eléctricos, dijeron los analistas, los fabricantes de automóviles necesitan un modelo de ventas directas, como en Tesla y Rivian, que pase por alto a los concesionarios y la parte de los ingresos que reciben. Los fabricantes de automóviles también necesitan reducir los costos laborales.

     “Ford está logrando un gran progreso en lo eléctrico”, dijo Adam Jonas, analista de Morgan Stanley, en una nota de noviembre a los inversionistas. Los fabricantes de automóviles tradicionales “enfrentan serios desafíos con los vehículos eléctricos y, en nuestra opinión, requerirán acciones 'no tradicionales' para abordarlos”.

     Ford ya construye el Mustang Mach-E en México, donde los salarios son una pequeña fracción de lo que son en los Estados Unidos. El fabricante de automóviles también está construyendo su primera planta de ensamblaje completamente nueva en medio siglo, para fabricar camiones eléctricos de la serie F en Tennessee. , y el UAW no tiene garantías de que representará a esos trabajadores.

     Hay un precedente de lo que están considerando Farley y Field. En 2017, el proveedor de automóviles Delphi Technologies escindió su negocio de tren motriz de motor de combustión y cambió el nombre de la empresa restante a Aptiv, que se enfoca en electrónica y software para vehículos eléctricos y automóviles autónomos. Aptiv comenzó a cotizar a múltiplos mayores.

     Como fabricante de automóviles a gran escala, Ford tiene un impulso más grande, aunque Farley parece ansioso por cambiar las cosas.

     “Este es un cambio de cultura en Ford”, dijo en la llamada de ganancias. “Esto es parte del cambio de ritmo”.