La Asofom tiene entre sus prioridades temas como el fondeo, la digitalización y una regulación más adecuada. Foto Axis negocios
La Asofom tiene entre sus prioridades temas como el fondeo, la digitalización y una regulación más adecuada. Foto Axis negocios

22 de ago. (Axis negocios) -- Para las sociedades financieras de objeto múltiple, o sofomes, sus necesidades y relevancia dentro del sistema financiero mexicano no son del todo claras para los actores con los que se relaciona a pesar de tener 16 años de existencia, más ahora que nunca cuando estan en medio de una crisis de reputación por problemas de algunos de sus miembros más prominentes.

     Este tipo de empresa fueron creadas para atender las necesidades de financiamiento de grandes segmentos de empresas y familias no atendidos por los bancos tradicionales. Sin embargo, para su operación reclaman mayor fondeo, digitalización y una regulación más adecuada que les permita prosperar.

     Las sofomes suman una cartera que rebasa el billón de pesos (50 mil millones de dólares), otorgan uno de cada cinco pesos del financiamiento empresarial del país y dan su primer crédito a 60% de las nuevas pequeñas y medianas empresas.

     “El sector financiero no bancario es ya un sector diversificado, estable y en crecimiento con cada vez mucho más importancia”, dijo en entrevista con Axis negocios Enrique Presburguer, presidente nacional de la Asociación Nacional de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple, o Asofom.

     Preburger destacó que ni las casas de bolsa ni los inversionistas potenciales como las administradoras de fondos para el retiro, tambíén conocidas como afores, cuentan con áreas especializadas en estudiar a las sofomes, por lo que el potencial de financiamiento que podrían dedicar al sector está desaprovechado.

     “Justamente no hay profundización del análisis ni entendimiento del sector financiero no bancario”, dijo el empresario, quien también es director general de Factor Exprés, una sofom que ofrece financiamiento, arrendamiento y crédito revolvente a empresas.

     Como gremio, la Asofom busca actualmente la implementación de esas áreas, así como otras estrategias de promoción, en asociación con otros participantes del mercado, como la Bolsa Mexicana de Valores y la Bolsa Institucional de Valores, los auspiciadores del mercado bursátil mexicano.

    Aunque las sofomes llevan siete años representando entre un tercio y la mitad de las emisiones de deuda en el país, el mercado no atraviesa su mejor momento y el levantamiento de deuda y capital tienen potencial para ser mucho mayor, agregó Presburguer. 

     En cuanto al ámbito regulatorio “el problema central es que a veces va en contrasentido, la autoridad en lugar de entender que las sofomes están creciendo, necesitan más financiamiento para impulsarse, lo que están haciendo es frenar al sector financiero no bancario, sobreregulándolo y poniéndole trabas y cada vez más cargas burocráticas”, dijo el presidente de la que es la asociación de financieras no bancarias más grande de América Latina.  

     Para la asociación a la que pertenecen 200 de las más de mil 900 sofomes que operan en México el tema es falta de información y especialización, no de dolo, pues si las autoridades mostraran más interés en comprender la relevancia del sector, sobre todo para el sector empresarial, probablemente lo impulsarían más, considera Presburguer.

     Entre las prioridades de la organización con el regulador está el apellido de entidades “no reguladas”; así como facilitar los procesos de bursatilización de cartera, canalizar más dinero de la banca de desarrollo a las sofomes y modificar disposiciones fiscales, entre otros asuntos.

     Asofom incluso prepara bases de datos con base en encuestas que le servirán tanto de cara a las autoridades como de manera interna para que sus agremiados tengan información comparativa por región y sector.

     “La tendencia es de crecimiento del sistema financiero no bancario porque es lo que la economía exige. Finalmente, en un país donde mayoritariamente hay pymes, la economía es cada vez es más financiera”, agregó el presidente del organismo en referencia al acrónimo que se usa para agrupar a las pequeñas y medianas empresas.

     Ante la perspectiva de posible recesión, la Asociación se dijo confiada de su papel, pues en tiempos adversos se generan más necesidades de liquidez y durante la pandemia, por ejemplo, el sector creció a ritmo de doble dígito. Sin embargo, otro de sus grandes retos actuales es su mismo financiamiento.

     A partir de los problemas financieros presentados por grandes sofomes como AlphaCredit o Crédito Real, y más recintemente Unifin, el sector ha sufrido una pérdida de confianza por parte de sus fondeadores, principalmente internacionales, algo incluso destacado por calificadoras crediticias somo S&P Global Ratings.

     Sin embargo, Asofom considera que ese aún no es un problema sectorial.

     “La pérdida de confianza es percepción más no realidad, es un tema más mediático que real”, dijo Presburguer. A pesar de los casos, “siguen saliendo bursatilizaciones cada semana”.

     Además, el financiamiento europeo y estadounidense que están recibiendo actualmente las sofomes que pertenecen a la organización está en su nivel más alto en los 16 años que tiene de existencia.

     “En México hay más de mil 900 sofomes”, dijo Emanuel González, vicepresidente nacional de Asofom. “Y el apetito está, fondos de capital privado nacionales, europeos y americanos”.

 


Fecha de publicación: 22/08/2022

Etiquetas: Sofomes financieras México crisis sector información