Hasta el mes de julio, Gruma el mayor fabricante de productos a base de maíz a nivel mundial, vendía la tonelada de maíz nixtamalizado a más de seis mil pesos. Foto Facebook/MasecaMexico
Hasta el mes de julio, Gruma el mayor fabricante de productos a base de maíz a nivel mundial, vendía la tonelada de maíz nixtamalizado a más de seis mil pesos. Foto Facebook/MasecaMexico

7 de sep. (Axis negocios) -- El gobierno de México busca citarse con la dirigencia de Gruma, el mayor fabricante de productos de maíz del mundo, con la intención de pedir explicaciones sobre el aumento en el costo de harina de maíz nixtamalizado en México en un contexto de precios elevados en las tortillas y en general con inflación alta.

     La intención es que sean los funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) quienes se reúnan con Juan González Moreno, presidente y director general de la trasnacional mexicana, para comprender las razones de los aumentos por parte de Maseca, la filial a través de la cual opera Gruma en México, de acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador.

     El argumento del presidente es que la tonelada de maíz nixtamalizado que vende Gruma tiene un precio que supera los seis mil pesos (300 dólares), lo que contrasta con los precios de Minsa, la segunda productora de harina de maíz más grande, que vendía la tonelada en cuatro mil pesos, o un tercio menos que Gruma, de acuerdo con datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), una situación que para el mandatario no está justificada.

     “El señor Juan González yo creo que va a ayudar. Se acordó que la Secretaría de Hacienda hable con él, escuchar cuál es la justificación. Lo que no se puede [es] que en una época de crisis de inflación, de carestía, se obtengan ganancias extraordinarias”, dijo López Obrador, en su reunión con medios. “Ya estamos atendiendo este tema con el propósito de controlar la inflación que no se nos vaya más allá de lo normal”.

     El gobierno busca reunirse con una de las empresas más globales de México como parte de sus esfuerzos con los que pretende controlar una inflación que afecta a los sectores socioeconómicos de la base de la población.

     Así como se busca el encuentro con el hijo de Roberto González Barrera, fundador de Gruma --y quien falleció 10 años atrás--, el mandatario también dijo que funcionarios de su gobierno hablarán con directivos de Minsa para pedir que no aumenten los precios, así como con integrantes de Walmart de México y Centroamérica, Chedraui y Soriana --las tres mayores cadenas minoristas del país--, para evitar alzas en los productos de primera necesidad.

     El primer mandatario dijo que los intentos para evitar aumentos desmedidos de productos de la canasta básica, cuyo mayor esfuerzo es el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), también contemplan diálogos con productores de atún, pollo y huevo, ente otros directivos de empresas relevantes.

     Aparentemente el programa no ha dado los resultados esperados y solo los subsidios al combustible que implementó la Federación parecen ser los causantes de que la inflación no se dispare, no obstante, los últimos datos de inflación no parecen moderar y los especialistas ya esperan que el alza a finales de 2022 sea de 8.2%.

     El precio promedio del kilo de tortilla en México en tortillerías se ubica en 20.80 pesos promedio, mientras que en tiendas de autoservicio cuesta 12.90 pesos por kilo, de acuerdo con cifras de Profeco. Sin embargo, existen reportes de que en algunas localidades del país el kilogramo de tortilla cuesta hasta 30 pesos.

     Apenas el 15 de agosto, Gruma recibió críticas del titular del órgano encargado de proteger a los consumidores, Ricardo Sheffield Padilla, por incrementar el precio de harina de maíz nixtamalizado.

     En su momento, Sheffield incluso hizo un llamado informal a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) para que vigile el mercado de la harina de maíz en México en busca de posibles irregularidades, aunque no fue muy claro para explicar el vínculo directo de uno de los insumos para la producción de tortillas con los aumentos de los precios de ese alimento clave en la dieta del mexicano.

     Mientras tanto, Gruma reportó al menos en el segundo trimestre de 2022, el impacto de las presiones inflacionarias tanto en sus materias primas como en sus costos de distribución a raíz de la guerra entre Rusia y Ucrania, pese al aumento de precios durante el periodo.    

     El flujo operativo de la compañía disminuyó 0.1% en el ese segundo cuarto del año frente a igual lapso de 2021, prácticamente sin cambios cuando el consenso de analistas esperaba un aumento de 1.5%.  En tanto, las ganancias netas disminuyeron 11% de abril a junio de este año en comparación con el mismo periodo de 2021, un resultado 2.8% mayor a lo previsto por el mercado.

     Tas los comentarios de López Obrador, las acciones de Gruma cerraron con una caída de 1.50% en la sesión bursátil de este día, para cotizar en 221.31 pesos por título, en un día en el que el índice de referencia S&P/BMV IPC incrementó 0.33%.

     Gruma no ofreció su posicionamiento sobre lo dicho por el presidente.

 

*Dassaev Rodríguez contribuyó con la elaboración de esta historia.

 


Fecha de publicación: 07/09/2022

Etiquetas: Gobierno Gruma precio harina maíz tortilla inflacion