La falta de liquidez de Tangelo es un reflejo de lo que ocurre con financieras que como ella y que forman parte de un sector mejor conocido como
La falta de liquidez de Tangelo es un reflejo de lo que ocurre con financieras que como ella y que forman parte de un sector mejor conocido como

17 de ene. (Axis negocios) -- Tangerine Pomelo Group o Tangelo, la financiera no bancaria que antes llevaba por nombre Mexarrend, dio a conocer que tomará una serie de medidas que tienen la intención de permitirle manejar su situación financiera y mantener la liquidez de su negocio, entre ellas la suspensión de pagos a los tenedores de sus bonos, en lo que representa un nuevo capítulo de la crisis de credibilidad que enfrentan las sociedades financieras no bancarias mexicanas.

     Como ocurriera con Unifin, que es la mayor arrendadora independiente de Latinoamérica, y otras empresas de su sector en México, Tangelo no goza de confianza para acceder al financiamiento necesario para su modelo de negocio. La pérdida del apoyo ocurre de forma muy parecida a lo que ocasionó la debacle de otros grandes, y hasta hace poco prósperos prestamistas especializados en créditos de nómina y que se resumen en problemas contables. Tangelo reconoció el martes esas deficiencias. 

     "Como resultado de una revisión en curso realizada en coordinación con asesores de la Sociedad respecto del portafolio y otros activos de la Sociedad, la administración recientemente descubrió ciertos errores en sus registros de activos financieros", dijo en un comunicado publicado a través de la Bolsa Institucional de Valores, bolsa donde colocó sus últimos instrumentos.

     Tangelo dijo que a raíz de ello ahora espera dar de baja activos financieros por un valor aproximado de 655 millones (35 millones de dólares). Cifra que podría cambiar luego que la empresa dijera que no ha cerrado aún la revisión contable de sus activos. Agregó que el error es el único que ha encontrado y para corregirlo dará de baja activos financieros "según resulte apropiado".

     La falta de liquidez para la empresa antes llamada Mexarrend, que cambió su nombre a Tangelo cuando se fusionó hace un año con la fintech colombiana Zinobe, es un reflejo de lo que ocurre con financieras como ella que forman parte de un sector mejor conocido como "banca en la sombra" o shadow banks. En ocasiones también catalogados como miembros de la industria financiera no bancaria.

      Cuando Alpha Credit, otra financiera especializada inmersa en problemas, advirtió en abril de 2021 que re-expresaría sus estados financieros de 2018 y 2019 para corregir un error contable en su posición de derivados, las instituciones que le otorgan financiamiento cerraron la llave no solo a ella, sino a otros negocios similares.

     Crédito Real, que como Alpha Credit se especializa en hacer préstamos que cobraba directo de las nóminas de trabajadores estatales, fue la segunda en caer por esa falta de liquidez y también por una contabilidad deficiente, ya que admitió que la mitad del valor de su cartera de crédito había sido reconocida como intereses no pagados.

     El común denominador en estas dos empresas es que su auditor independiente fue el despacho Galaz, Yamazaki, Ruiz Urquiza, que en México representa al prestador de servicios profesionales Deloitte. De acuerdo con el último informe anual de Tangelo, Deloitte México también fue su auditor independiente al menos de 2018 a 2021.

     Alpha Credit aún negocia con sus acreedores, mientras que Crédito Real ya fue declarada en disolución. Tras ellas, Unifin fue la tercera gran empresa que dejó de pagar a sus tenedores luego de meses de negociaciones para conseguir financiamiento. También está en medio de un proceso de reestructura ordenada.

     El default de Tangelo ya parecía inminente para las agencias calificadoras. La semana pasada recibió un nuevo recorte en su calificación crediticia por parte de la agencia S&P Global Ratings, debido a esa liquidez limitada y a que no contaba con una estrategia para abordar sus próximos vencimientos de deuda de mercado.

     La calificadora, con sede en Nueva York, bajó sus calificaciones en escala global de '‘CCC+’ a ‘CCC-’, dos escaños por arriba de la categoría de incumplimiento y parte del rango que se conoce como grado especulativo. Un nivel que además muestra vulnerabilidad a un incumplimiento de pago. 

     “La baja de las calificaciones refleja nuestra incertidumbre sobre la capacidad de Mexarrend para afrontar su servicio de deuda”, dijo S&P Global Ratings, una de las tres mayores agencias calificadoras del mundo, en un comunicado. “Consideramos que la liquidez de Mexarrend se ha debilitado en los últimos meses, ya que el acceso al financiamiento sigue siendo un reto para la empresa”.

     Tangelo dijo este martes que para paliar su falta de liquidez incrementará reservas respecto a su cartera vencida durante el cuarto trimestre de 2022 por un monto aproximado de 100 millones de pesos (5.4 millones de dólares).

     Este panorama fue su argumento para explicar que para maximizar su flexibilidad financiera en el corto plazo y manejar de la mejor manera su liquidez, no esperaba realizar los pagos de los siete bonos emitidos y que vencen el jueves por una cantidad aproximada de 85 millones (4.6 millones de dólares). Tampoco tiene entre sus planes pagar el 24 de enero 14.5 millones de dólares de intereses de bonos internacionales colocados en el extranjero.

     "Esta decisión tiene por objeto priorizar el uso de recursos líquidos para que la Sociedad pueda continuar con su operación dadas sus restricciones de liquidez y el ambiente adverso que actualmente afecta a los mercados de capitales.

     Tangerine dijo que buscará dialogar con los tenedores y que explora las opciones disponibles "para poder colocarse en una posición sólida que le permita continuar el desarrollo de sus actividades y brindar soluciones crediticias a las pequeñas y medianas empresas en la región".

 


Fecha de publicación: 17/01/2023

Etiquetas: Mexarrend Tangelo Tangerine Pomelo Group Sofom