La reforma de la legislación bursátil mexicana podría llevar a más colocaciones, pero aún quedan temas pendientes para el crecimiento del mercado. Foto archivo
La reforma de la legislación bursátil mexicana podría llevar a más colocaciones, pero aún quedan temas pendientes para el crecimiento del mercado. Foto archivo

3 de may. (Axis negocios) -- Las modificaciones a la legislación bursátil recientemente aprobadas en México por el Senado de la República que buscan dar un impulso al tamaño y diversificación del mercado podrían traer consigo resultados positivos y beneficiar a varios actores del sector.

     Sin embargo, las modificaciones a la Ley del Mercado de Valores y la Ley de Fondos de Inversión, que aún tienen que ser aprobadas por la Cámara de Diputados y por ende son susceptibles a cambios, no parecen suficientes e incluso podrían plantear nuevos riesgos, de acuerdo con expertos.

     La reforma “deriva del diagnóstico generalmente aceptado sobre la falta de profundidad del mercado bursátil mexicano, la necesidad de flexibilizar ciertos procesos para la oferta de valores, así como la generación de incentivos a las pequeñas y medianas empresas para utilizar el mercado bursátil mexicano”, explicó en un reporte la firma de asesoría legal White & Case.

     La iniciativa, aprobada por el Senado como parte de una tanda de reformas que se aprobaron de manera polémica, busca por un lado hacer crecer el mercado de valores local y por el otro convertirlo en una alternativa de financiamiento para empresas de todos los tamaños.

     Los cambios, esperados e impulsados también por las bolsas de valores mexicanas, llegan luego de décadas de señalamientos de un mercado bursátil pequeño en relación con la economía del país, la segunda más grande de América Latina y una de las 20 mayores del mundo.

     México cuenta con más de cuatro millones de empresas, mientras que en el mercado cotizan menos de 140. La capitalización de las emisoras mexicanas, de 530 mil millones de dólares, representa 37% del producto interno bruto, cifra inferior al caso de Colombia, Perú o Chile, de acuerdo con cálculos de la calificadora crediticia Moddy’s de México.

     Además, hace un lustro en que el mercado bursátil ha sufrido una sequía de colocaciones, particularmente en el apartado de capitales, y ahora enfrenta una oleada de deslistes.

     En ese sentido, la reforma propone una inscripción simplificada de valores, un proceso que resta carga regulatoria para la emisión de deuda o capitales para pequeñas y medianas empresas, con la supervisión de las casas de bolsa y las bolsas de valores en lugar de las autoridades financieras.

     Los detalles del nuevo régimen de listado, en cuyas ofertas solamente podrán participar inversionistas institucionales o calificados, serán emitidos posterior a su aprobación final por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

     La nueva figura “puede parcialmente ayudar a profundizar el mercado bursátil lo que sería positivo para algunas empresas medianas y pequeñas que actualmente no cotizan o no tienen deuda emitida”, escribieron los especialistas de Moody’s Local de México.

     Para la agencia, los beneficios también llegarían a las corredurías, principalmente por una mejor perspectiva para nuevas suscripciones de valores, y luego por una mayor oferta de productos, mejores volúmenes de negociación y más activos bajo administración.

     Por otro lado, las administradoras de fondos para el retiro y los fondos de inversión de renta fija, los principales inversionistas institucionales del país, así como las aseguradoras, pese a sus límites de inversión, tendrían más opciones para diversificar sus portafolios.

     No obstante, “seguimos creyendo que siguen existiendo grandes obstáculos para generar una mayor profundidad en el mercado financiero mexicano como el débil marco legal del país, la carga administrativa-regulatoria, la informalidad, la inseguridad y la idiosincrasia en temas de gobierno corporativo en varios sectores de la economía”, agregaron los expertos de Moody’s.

     La Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles estima que podrían listarse entre 500 y dos mil nuevas emisoras, sin embargo, la calificadora crediticia, citando datos de la Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas, aclara que hay que considerar primero al 64% de las unidades económicas que tienen una mayor institucionalización y tienen acceso al crédito bancario (siendo que más de un tercio prefiere financiamiento con proveedores).

     Para Miriam Acuña, Daniel Castañón y Regina Labardini, analistas de la casa de bolsa GBM, los impactos de la propuesta de listado simplificado también podrían ser adversos, a falta de conocer la legislación específica.

     “La figura de autorregulación de las cotizaciones y emisiones simplificadas plantea inquietudes sobre la calidad de los informes, en concreto sobre la representación fiel de la realidad económica”, escribieron los especialistas en un reporte. “Esto podría deteriorar la relación con todas las partes interesadas, un aspecto central de criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés)”.

     Algunos, como Carlos Hermosillo, analista bursátil independiente, resaltan por otro lado la ausencia de medidas enfocadas en los inversionistas minoristas, conocidos como reatil, los cuales han crecido notablemente los últimos años en el país y en todo el mundo.

     “Ciertamente son positivas, pero más que incentivar específicamente el mercado de pymes, me parece que la autoridad no está incentivando la participación del inversionista persona física individual (retail) ni ayudando a fomentar una cultura financiera; esto último es crítico y es por donde se debería empezar”, dijo el especialista mediante una respuesta escrita.

     Otro de los aspectos de la reforma considera cambiar el régimen de las sociedades anónimas bursátiles, o la figura que utilizan la mayoría de las emisoras mexicanas, para facilitarles la emisión de acciones con derechos diferenciados sin la necesidad de autorizaciones especiales.

     En ese sentido los accionistas podrán delegar al consejo de administración, explica White & Case, la facultad de aumentar el capital social y determinar las condiciones de la suscripción de acciones, incluyendo la exclusión del derecho de suscripción preferente, además de eliminar la prohibición de ofrecer paquetes de acciones diferenciadas para los accionistas.

     Además, la incorporación de poison pills a los estatutos de las emisoras, un mecanismo que busca evitar la adquisición hostil de una empresa, podrán ser incorporadas con un voto negativo de 20% de los dueños, contra el 5% actual.

     Estos cambios también fueron mirados con reservas por los especialistas de GBM.

     “La posibilidad de colocar acciones con diferentes derechos que permitirían a los fundadores retener el control --es decir, emitir las llamadas súper acciones-- podría perjudicar las relaciones con los accionistas minoritarios, desde nuestro punto de vista”, escribieron en su reporte.

     Por otro lado, matizaron los analistas, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico dicta que las acciones diferenciadas no necesariamente llevan a malas prácticas, siempre que se divulguen las estructuras de capital para la mejor toma de decisiones de inversionistas minoritarios. 

     La reforma también contempla cambios para permitir a empresas que no estén en condiciones de efectuar una oferta pública de acciones, o cuya cotización se encuentre suspendida, deslistarse del Registro Nacional de Valores.

     Actualmente en México cotizan varios instrumentos de empresas que quebraron o desaparecieron y no retiraron sus instrumentos del mercado, como la comercializadora de ropa Edoardos Martin, la productora de toallas Hilasal o la constructora de vivienda Casas Geo, o las de otras que cambiaron completamente su estructura, como la edificadora Empresas ICA.

     Aspectos de la propuesta legislativa que fueron recibidos positivamente por los analistas fueron la posibilidad de constituir fondos de inversión de cobertura, así como la vía para que las autoridades establezcan disposiciones de carácter general en materia ambiental, social y de gobierno corporativo, estándares conocidos por sus siglas en inglés, ESG.

     La reforma “posiblemente ayude a que veamos algunas colocaciones de nuevas empresas, pero para que se genere un buen volumen de negocios, falta mucho. . . por algo se empieza”, agregó Hermosillo.

     De cualquier manera, la aprobación por parte del Senado fue celebrado por actores del mercado como la Bolsa Institucional de Valores (Biva), el auspiciador del mercado que compite desde 2018 con la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

     Con los cambios a la regulación “se busca impulsar, por un lado a promover la oferta de valores, permitiendo que un mayor número de empresas mexicanas en crecimiento (medianas e incluso pequeñas) que busquen financiamiento, puedan obtenerlo en el mercado de valores de forma ágil y eficiente y acorde a su nivel de maduración”, escribió María Ariza, directora de Biva, en la red social Twitter.

     La directiva además reconoció que “falta mucho por hacer pues deben resolverse otros temas estructurales e incentivar la inversión en nuestro mercado y en ese sentido”.

 


Fecha de publicación: 03/05/2023

Etiquetas: BMV Biva regulación México mercado valores colocaciones sequía Senado