La inflación de Estados Unidos queda por debajo de lo esperado en mayo. Foto AP/Eduardo Munoz Alvarez
La inflación de Estados Unidos queda por debajo de lo esperado en mayo. Foto AP/Eduardo Munoz Alvarez

12 de jun. (Axis negocios) -- La inflación de Estados Unidos continuó su proceso de desaceleración en mayo, una situación esperada y que podría darle argumentos a la Reserva Federal para tomar un respiro en su ciclo alcista de las tasas de interés esta misma semana.

     El índice de precios al consumidor de Estados Unidos aumentó 0.1% mensual en el quinto mes del año, en cifras ajustadas por estacionalidad, de modo que anotó su décimo incremento consecutivo, informó Bureau of Labor Statistics (BLS).

     No obstante, el alza mensual fue menor que el aumento de 0.4% de abril y quedó en su menor nivel (empatado con marzo) de los últimos cinco meses.

     De esta manera, en la comparación anual, la inflación presentó un avance de 4.0%, en cifras sin ajuste estacional, su incremento más modesto en 26 meses, o desde marzo de 2021 cuando estuvo en 2.6%.

     El crecimiento anual de precios lleva 11 meses consecutivos en desaceleración, o con aumentos inferiores a la lectura previa, luego de alcanzar un máximo de más de cuatro décadas en junio de 2022, con 9.1%.

     “El índice de vivienda fue el que más contribuyó al aumento mensual de todos los artículos, seguido por un aumento en el índice de automóviles y camiones usados”, dijo BLS, en el comunicado donde dio a conocer las cifras. “El índice de alimentos aumentó 0.2% en mayo después de haber permanecido sin cambios en los dos meses anteriores”.

     En el apartado anual, alimentos presentó un crecimiento de 6.7%, commodities ascendió 2%, servicios subió 6.6% y energía registró un descenso de 11.7%.

     La caída en energía obedece a una comparación inusual, ya que hace un año, en mayo de 2022, ese apartado avanzó 34.6%, a partir del impacto global del estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania, que pegó de forma directa al petróleo y a granos como el trigo.

     Pero más allá del impacto energético, “una buena noticia es que otros componentes tuvieron disminuciones, como el caso de los servicios médicos (con una caída de 0.1% mensual) o los vehículos nuevos (con un descenso de 0.1%), mientras que los alimentos (0.2%) registraron variaciones similares a las de la etapa previa a la guerra y a la pandemia de la covid-19”, resaltó Marcos Daniel Arias, economista de Monex Casa de Bolsa.

     El desempeño de la inflación quedó por debajo de las expectativas de los analistas encuestados por el portal financiero Investing.com, quienes esperaban un alza mensual de 0.2% y un crecimiento anual de 4.1%.

     “La caída de los precios de la energía y la lenta inflación de los alimentos mantuvieron bajo control el índice general”, escribieron en un reporte Sarah House y Michael Pugliese, especialistas del banco estadounidense Wells Fargo.

     El índice subyacente de los precios, que excluye variables volátiles como alimentos y energía, subió 0.4% mensual en mayo y avanzó 5.3% anual, en línea con lo esperado por los analistas que encuestó Investing.

     El crecimiento mensual del apartado subyacente mantuvo su ritmo de crecimiento por tercer mes consecutivo.

     En la comparación anual, el indicador desaceleró respecto de la lectura previa por séptima vez en los últimos ocho meses (con marzo como la excepción), aunque continúa como elemento de presión al estar por tercer mes seguido por encima de la inflación general.

     Los analistas creen que la desaceleración subyacente continuará, no obstante, no lo consideran una batalla ganada.

     “Esperamos una desaceleración más pronunciada de la inflación subyacente en los próximos meses”, escribieron House y Pugliese. “El progreso direccional no debe confundirse con la misión cumplida. Hay mucho terreno por recorrer entre la tasa actual del 5.0% de la inflación subyacente y el objetivo del 2% del Federal Open Market Committee”.

     El dato es uno de los más importantes para el seguimiento de las condiciones económicas que da la Reserva Federal, que justamente este martes comienza su reunión de junio, a partir de la que dará a conocer su siguiente decisión de política monetaria el miércoles.

     El regulador lleva 10 reuniones consecutivas con aumentos de la tasa de interés de referencia, la cual ha llegado a su nivel más alto desde septiembre 2007 --previo a la Gran Recesión-- y las condiciones actuales parecen adecuadas para una pausa. 

     “El descenso de la inflación general es una buena noticia y, desde nuestra perspectiva, garantiza que las tasas no tendrán cambios, al menos en la reunión de junio”, agregó Arias, de Monex.

     El mercado ya anticipaba que este mes podría suceder una pausa en el ciclo actual de aumentos de tasas de interés, pero tras la publicación de la inflación esa probabilidad subió a casi 92%, de acuerdo con una herramienta elaborada por el mercado Chicago Mercantile Exchange (CME) con base en los futuros de bonos.

     Sin embargo, un nuevo incremento de la tasa de referencia de la autoridad monetaria en julio no está descartado, con una probabilidad actual de 60%.

     Ello sucedería debido a que el mercado laboral continúa sólido --con una tasa de desempleo cerca de mínimos históricos--, la inflación general sigue muy por encima del objetivo de 2% y la subyacente muestra un paso de desaceleración lento, por lo que será cada vez más el foco de atención.

     “Aún más preocupante [que el índice general] es la obstinación de la inflación subyacente”, señalaron los especialistas de Wells Fargo. “El índice de precios al consumidor subyacente subió un 5.3% en los últimos 12 meses y un 5.0% en los últimos tres meses [anualizado], una señal de que la inflación subyacente se ha desacelerado, pero solo marginalmente”.

 

* César Pérez contribuyó con esta historia

 


Fecha de publicación: 13/06/2023

Etiquetas: EUA economia inflacion precios consumidor subyacente Fed politica monetaria tasas