Mientras Hacienda confía en impulso del nearshoring al PIB, analistas dudan

24 de jul. (Axis negocios) -- El gobierno de México confía en que la relocalización de empresas en el país, un fenómeno conocido como nearshoring, ayudará a impulsar aún más el crecimiento económico desde este año gracias a la inercia generada por una mayor captación de inversión extranjera directa. No obstante, para los analistas del sector privado este optimismo puede ser prematuro.

     La Secretaría de Hacienda planteó recientemente la posibilidad de que el producto interno bruto de México crezca por encima de 3% en 2023, que es el techo de crecimiento que fijó desde el cierre del año pasado, ante el impulso del fenómeno de relocalización sobre la actividad económica y luego del sorpresivo dinamismo observado en el primer semestre.

     “El nearshoring está incrementando la Inversión Extranjera Directa en el país y está impulsando el crecimiento”, dijo Gabriel Yorio, el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, en una ponencia reciente en Georgetown Americas Institute. “Es muy probable que este año vamos a crecer tal vez por encima de 3%, entonces México, después de la covid-19 y con la acentuación del nearshoring, [estará] creciendo entre 3 y 4% en los últimos cuatro años”.

     Por el contrario, ningún analista considera actualmente que dicho pronóstico sea realizable, pues si bien la mayoría coincide en que el nearshoring tendrá un impacto favorable sobre la economía mexicana, este será paulatino y difícilmente se apreciará en 2023 con la magnitud que espera Hacienda.

     La estimación puntual de algunas mesas de análisis es que el nearshoring puede contribuir con entre 0.3 y 0.5 puntos porcentuales del producto interno bruto este año. De ahí que el consenso espera un crecimiento de 2.4%, aún por debajo de lo que prevén las autoridades, de acuerdo con la última encuesta de expectativas de Citibanamex, aunque eso sí, muy superior a las previsiones a inicio de año que eran inferiores a 1%.

     “Nuestra perspectiva es que Hacienda posiblemente esté sobreestimando el impacto que se está dando por el nearshoring”, dijo Víctor Ceja, economista en jefe de Valores Mexicanos o Valmex, en entrevista. “A principios de año, ellos estimaban que el impacto sobre el producto interno bruto sería de 1.2 puntos porcentuales de manera permanente. . . Nosotros estimamos medio punto porcentual para los próximos años”.

     En opinión del economista, las cifras de inversión extranjera del primer trimestre (último dato disponible) no reflejan aún una inercia positiva por el nearshoring, pues si bien el país captó 18 mil 636 millones de dólares de capital foráneo durante el periodo, solo 5% de ese monto provino de nuevas inversiones --la proporción más baja en casi nueve años--, que es el área en la que debería observarse un efecto más pronunciado por la relocalización.

     “En el primer trimestre, este rubro [de nuevas inversiones] fue muy bajo”, agregó Ceja, en entrevista.

     Claro que las autoridades confían en que se pongan en marcha los anuncios de inversión de compañías extranjeras, entre ellos el de Tesla por hasta 10 mil millones de dólares para la construcción de una nueva planta en la zona metropolitana de Monterrey, o el de Mexico Pacific Limited por 14 mil millones de dólares para proyectos de gas en Sonora, en su mayoría durante este año, lo que por ende contribuirá a un mayor crecimiento.

     De hecho la Secretaría de Economía estimó que, hasta finales de mayo, la iniciativa privada había realizado 117 anuncios de inversión por más 48 mil millones de dólares, de los cuales, 30 mil millones o poco más de 60% se materializarían este año y el resto en los próximos tres.

     “Es importante afirmar que ninguno de estos anuncios forma parte de los datos oficiales que se publican referentes a la Inversión Extranjera Directa”, dijo la dependencia a cargo de Raquel Buenrostro, en una publicación de Twitter.

     Si bien es difícil precisar qué porcentaje de esta inversión se relaciona directamente con la intención que tienen las empresas de relocalizarse en México, Hacienda calculó hasta junio anuncios de 20 empresas por 13 mil millones de dólares debido al nearshoring.

     “Destaco que los anuncios subestiman el potencial, ya sea porque muchos planes no se anuncian y están en marcha, y porque los anuncios preliminares no incluyen todo el potencial que consideran las empresas”, dijo Rogelio Ramírez de la O, el secretario de Hacienda, en la Reunión de Consejeros Regionales de BBVA México.

     No obstante, algunos analistas reiteraron que el impulso del nearshoring sobre el crecimiento será mínimo en el corto plazo, por lo que la economía se está beneficiando de otros factores, principalmente el consumo interno que a su vez se ve favorecido por los fuertes flujos de remesas o los aumentos salariales.

     “Potencialmente se puede crecer más de 3% este año, pero pensamos que el nearshoring puede aportar 0.3” puntos porcentuales, dijo Gabriel Casillas, economista en jefe para Latinoamérica del banco británico Barclays, en conferencia de prensa la semana pasada. “Es muy probable que el crecimiento se dé porque no hubo recesión en Estados Unidos, como la mayoría esperaba”.

     El economista considera que, en el mediano y largo plazo, es factible que el PIB pueda crecer a una tasa anual de 5% o más y que el nearshoring contribuya con gran parte de esa expansión, pero dicha inercia no será sostenible si las autoridades no resuelven primero una serie de desafíos.

     “El nearshoring nos va a dar [tasas de crecimiento] de 5 o 6% durante un año o dos en algún momento, pero no será sostenible”, dijo Casillas, en conferencia. “Para que sea sostenible el país necesita dos cosas: que el sector energético funcione con lógica de mercado y que se mejore el Estado de Derecho”.