Fed eleva tasas a mayor nivel desde 2001 y abre la puerta a otro incremento en septiembre

26 de jul. (Axis negocios) -- La Reserva Federal de Estados Unidos cumplió con las expectativas del mercado y aplicó un incremento adicional a las tasas de interés de referencia de ese país, con lo que éstas se ubicaron en un rango de 5.25 a 5.5%, al tiempo que abrió la puerta a un nuevo ajuste en los próximos meses.

     Con este aumento, las tasas subieron a su nivel más alto desde marzo de 2001, o hace más de 22 años, a fin de controlar la inflación y devolverla al objetivo de 2% del Banco Central.

     La decisión fue tomada por unanimidad de votos de los integrantes del Federal Open Market Committee o FOMC, que es el órgano responsable de determinar la política monetaria de Estados Unidos.

     El alza de un cuarto de punto porcentual, que siguió a una pausa en junio luego de 10 incrementos consecutivos desde marzo de 2022, era ampliamente esperada por el consenso de analistas y agentes financieros, por lo que la atención se centró en los indicios que pudiera dar la Fed sobre posibles ajustes adicionales en las tasas, o bien, sobre el eventual fin del actual ciclo alcista.

     Jerome Powell, el presidente de la Fed, reiteró que los próximos movimientos de la autoridad monetaria estarán guiados por la evolución de las cifras económicas en el país y mantendrán un enfoque “reunión por reunión”, aunque adelantó que el Banco Central está listo para aplicar un nuevo ajuste al alza tan pronto como en septiembre, si ve argumentos para ello.

     “Diría que ciertamente es posible que subamos las tasas de nuevo en la reunión de septiembre, si los datos lo justifican”, dijo el banquero, en conferencia de prensa tras la decisión. “Y también diría que es posible que optemos por mantenernos en pausa en ese encuentro. Vamos a hacer evaluaciones cuidadosas, como dije, reunión por reunión”.

     Powell agregó que la política monetaria deberá mantenerse en terreno restrictivo “durante un tiempo”, ya que la evidencia actual sugiere que no ha permanecido en ese nivel lo suficiente como para lograr el efecto deseado de una baja sostenida en la inflación. Esto implica que el Banco Central puede dejar las tasas sin ajustes, o bien, subirlas nuevamente si considera que es lo apropiado.

     “La pregunta que nos vamos a hacer [en próximas reuniones] es si la señal general es que necesitamos hacer más, que tenemos que apretar más”, dijo Powell, durante la conferencia. “Y si recibimos esa señal, cuando sea que la recibamos --y ese es el juicio colectivo del comité--, entonces seguiremos adelante”.

     La inflación en Estados Unidos desaceleró a 3% anual en junio, el avance más modesto desde marzo de 2021 o en 27 meses, aunque la Fed no lo consideró argumento suficiente para dejar las tasas sin cambios como ocurrió en su reunión previa, ya que otros indicadores tuvieron un desempeño menos favorable.

     “El informe del IPC de junio fue bien recibido, pero es solo un reporte, los datos de un mes”, dijo Powell. “Esperamos que la inflación siga una trayectoria a la baja y que sea consistente con la lectura del IPC. Pero no sabemos eso, por lo que necesitaremos ver más datos”.

     Por su parte, otros indicadores apuntan a una economía que se mantiene sólida pese a la restricción monetaria, entre ellos el avance del producto interno bruto en el primer trimestre, así como las cifras de creación de empleo, que si bien se moderaron en junio, aún apuntan a una fortaleza del mercado laboral estadounidense.

     “Se mantiene el reconocimiento de un robusto mercado laboral, alta inflación e incertidumbre sobre los posibles efectos de una restricción del crédito”, dijo Jonathan Zuloaga, economista en jefe de Columbus Asesores Patrimoniales, en un reporte.

     De hecho, Powell destacó que el staff de la Fed ya no espera una recesión en Estados Unidos, como pronosticaba anteriormente, ante la resiliencia que mostró la economía en la primera mitad del año.

     Por ahora, la mayoría de los inversionistas de futuros esperan que las tasas permanezcan sin cambios por lo que resta de 2023, aunque algunos no descartan un nuevo ajuste al alza de 25 puntos base, especialmente en las reuniones de noviembre --con una proporción de 34.5%-- o diciembre --con 32.9%--, de acuerdo con datos de la plataforma FedWatch Tool del Chicago Mercantile Exchange.

     Powell agregó que no espera recortes de tasas este año, mientras que la posibilidad de evaluar reducciones en 2024 dependerá de la evolución de los precios para entonces, ya que el panorama inflacionario está sujeto a un alto grado de incertidumbre.

     “Se tratará de la confianza que tengamos en que la inflación, de hecho, está bajando a nuestra meta de 2%”, dijo el presidente de la Fed, en conferencia.

     Con el ajuste de este miércoles, las tasas en Estados Unidos han aumentado 525 puntos base desde marzo de 2022.

* César E. Pérez contribuyó a la elaboración de esta historia.