La inversión fija bruta en México anota en noviembre su segundo descenso de los últimos tres meses. Foto archivo
La inversión fija bruta en México anota en noviembre su segundo descenso de los últimos tres meses. Foto archivo

2 de feb. (Axis negocios) -- La inversión fija bruta en México registró un nuevo descenso en noviembre, un desempeño que, sumado a otros, contribuye a explicar el por qué ha experimentado una desaceleración la actividad económica en el último cuarto de 2023.

     La inversión fija en el país disminuyó 1.3% mensual en el penúltimo mes del año pasado, en cifras ajustadas por estacionalidad, para su segundo tropiezo en los últimos tres meses, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

     En términos porcentuales, la caída fue la segunda más pronunciada de los últimos 17 meses, solo detrás del descenso de 1.7% registrado en septiembre.

     El componente de construcción fue el principal responsable de este desempeño, pues bajó 2.8% en el undécimo mes del año, en cifras desestacionalizadas, aunque creció 20.7% frente al mismo periodo de 2022 --en su serie original--.

     La inversión en construcción residencial registró una caída de 5.9% en el mes, lo que en opinión de los expertos reafirma la tendencia observada durante el año. Por su parte, el apartado de construcción no residencial, que incluye obras públicas y proyectos relacionados con el fenómeno de relocalización o nearshoring, presentó una baja más modesta de 0.1%, aunque siguió moderándose tras registrar en septiembre un descenso de 12.1%, el mayor desde 1995.

     “En esta ocasión la debilidad se centró en el sector residencial, algo esperado por las bajas prevalecientes a lo largo del año y un efecto base retador”, dijeron economistas de Banorte encabezados por Juan Carlos Alderete, en un reporte. “Mientras tanto, el no residencial fue más estable en -0.1%, en nuestra opinión apoyado por el progreso en proyectos de infraestructura clave y la construcción de espacios industriales”.

     La inversión en maquinaria y equipo creció 0.4% mes a mes y aumentó 17.6% con respecto al mismo periodo de hace un año, lo que no fue suficiente para contrarrestar la caída del indicador.

     El retroceso de la inversión fija ayudaría a explicar la evolución de la economía nacional, que si bien creció 3.1% en 2023 --ligeramente por debajo de los pronósticos actualizados de analistas y del gobierno--, se expandió apenas 0.1% entre octubre y diciembre, lo que representa el incremento más débil de los últimos nueve trimestres.

     Si bien se contrajo en la comparación mes a mes, la inversión fija creció 19.2% interanual para su avance 33 consecutivo, reportó Inegi, como también se conoce al organismo encargado de recabar las cifras económicas del país.

     Pese a la baja de noviembre, el desempeño de la inversión quedó por arriba de las expectativas de los analistas encuestados por Infosel, quienes esperaban un descenso mensual desestacionalizado de 2% y un crecimiento anual de 18.7%.

     Un año atrás, en noviembre de 2022, la inversión tuvo un incremento de 2.2% en su serie mensual desestacionalizada y avanzó 7.8% año a año, en cifras originales.

     Por su parte, el consumo privado, que es otro de los indicadores clave de la demanda interna en el país, tuvo un desempeño más positivo con un avance de 0.7%, el quinto de los últimos seis meses, lo que le permitió borrar la pérdida registrada en octubre.

     Con estos datos y un alza anual de 5.6% --la número 33 consecutiva--, el indicador de consumo se ubicó en 109.3 unidades y batió de nueva cuenta su registro histórico, como ocurrió durante gran parte del año pasado.

     El consumo ha sido hasta ahora uno de los principales motores de crecimiento en el país, gracias al impulso recibido por los bajos niveles de desempleo, los aumentos salariales y las remesas, junto con presiones inflacionarias más contenidas, lo que permite a las personas realizar un mayor gasto en bienes y servicios.

     Para los expertos, la inercia favorable del consumo se mantendrá en los primeros meses de 2024, lo que podría darle un nuevo impulso a la actividad económica tras la desaceleración del último cuarto del año pasado.

     “Creemos que el dinamismo será mayor en el primer trimestre que al cierre del 2023. Esto, ante un mayor ingreso disponible de los hogares gracias a las transferencias de programas sociales (con algunos pagos adelantados para cumplir con la veda electoral)”, dijeron los especialistas de Banorte. “Adicionalmente, la fortaleza de los fundamentales continuará, destacando el crecimiento de los salarios reales --respuesta esperada por el aumento al salario mínimo-- y el buen dinamismo de las remesas”.

     Por componentes, el consumo doméstico creció 0.2% mensual desestacionalizado en noviembre, con la fortaleza centrada en los servicios con un alza de 0.5%, que contrarrestó el descenso de 0.2% en la compra de bienes.

     Por su parte, el consumo de mercancías de origen importado creció 6.3% frente al mes anterior.

 

* César Pérez contribuyó a la elaboración de esta historia.

 

 


Fecha de publicación: 02/02/2024

Etiquetas: Mexico economia inversion fija bruta construccion maquinaria equipo