Asofom descarta problema sectorial, ve recuperación Crédito Real

La Asociación de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Asofom) descartó que la situación financiera de Crédito Real, que cayó en impago de un bono, sea reflejo de lo que vive el sector.

     La organización dijo que la empresa cotizada en bolsa sufre una situación derivada de su exposición a los préstamos al consumo y más allá del golpe reputacional no refleja las finanzas de las sociedades financieras de objeto múltiple en general.

     “Sin duda es un shock fuerte verlo tambaleándose”, dijo en conferencia Enrique Presburguer, presidente nacional de Asofom. “Es importante precisar que no es un riesgo que tenga que ver con figura financiera si no con segmentos de crédito al consumo”.

     Para el organismo, la economía mexicana estaba en desaceleración, luego llegó la crisis provocada por la pandemia y ahora está en recesión, lo que provocó que se deteriorara el empleo y el poder adquisitivo de la población y dificultó que cubrieran préstamos de consumo.

     Crédito Real no es la primera entidad que presta a personas físicas sin garantías que entra en problemas, dijo Presburguer citando el caso de Banco Famsa --que entró en liquidación--, aunque fue cuidadoso en señalar que en la sofome no hubo malos manejos, sino tal vez expectativas optimistas.

     La financiera, que no pertenece a los agremiados de Asofom, incluso tiene perspectivas favorables, de acuerdo con la organización.

     “Simplemente es una consecuencia de la situación económica a nivel mundial ya nivel país”, señaló Presburguer. “Seguramente se va a levantar, va a lograr reestructurar adecuadamente, es una compañía grande que tendrá que refinanciarse internamente”.

     Asofom considera que las emisiones en bolsa de sofomes, que representan casi un tercio den mercado de deuda continuará sin problemas.

     Crédito Real faltó al pago del capital de un bono de 170 millones de francos suizos (184 millones de dólares) por falta de liquidez.

     La compañía, que cayó a nivel de default parcial para calificadoras crediticias, contrató asesores legales y financieros, luego de no conseguir a tiempo un nuevo crédito garantizado para enfrentar el vencimiento del bono.

     La financiera enfrenta el vencimiento de casi la mitad de su deuda total, que es tres veces mayor a su capital, entre 2022 y 2023, y lleva meses tratando de mejorar su balance, con base en lo que ya emprendió la venta de activos.

     El golpe reputacional para el sector llegó menos de un año después de que la también sofome AlphaCredit buscara un proceso de bancarrota en Estado Unidos y México afectada por errores contables que llevaron al deterioro de cerca de 200 millones de dólares de sus activos.