Maduro busca exigir a empresas que aporten a su nuevo fondo de pensiones estatal

El Gobierno de Venezuela propone un impuesto a las empresas privadas de hasta el 15% de sus salarios pagados para la creación de un fondo de pensiones estatal.

    De acuerdo con el proyecto de ley presentado el jueves por la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, las contribuciones se ingresarían al sistema público y se deducirían del impuesto a la renta. Algunos sectores estratégicos estarán exentos, según un borrador visto por Bloomberg, sin especificar cuáles.

     El proyecto de ley propuesto pone a prueba los vínculos recientemente restablecidos entre el Gobierno de Nicolás Maduro y el sector privado, que se ha visto golpeado por años de duros controles de precios y expropiaciones.

     Después de años de crisis económica e inflación descontrolada, el Gobierno de Venezuela tomó medidas para permitir el uso del dólar, lo que provocó cierto crecimiento económico. Aun así, el progreso ha sido desigual, particularmente para los más de cinco millones de venezolanos que luchan con pensiones estancadas pagadas en bolívares.

     De acuerdo con la ley, las pensiones no deben ser inferiores al salario mínimo, que equivale a menos de cuatro dólares antes de bonificaciones y cupones de alimentos equivalentes a 130 dólares al mes.

     Un funcionario de prensa del gobierno no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.

     El grupo empresarial venezolano Fedecámaras dijo el jueves en un comunicado que el plan agregaría una carga adicional al sector privado además de la ya compleja estructura tributaria que los empresarios tienen que enfrentar.