Televisa cambió como pocas empresas en una década, el precio de sus acciones también

10 de may. (Axis negocios) -- En junio de 2015, Grupo Televisa era una de las empresas más visibles y atractivas en el mercado de valores al grado de alcanzar en ese entonces su mayor nivel de capitalización de mercado en su historia. En ese entonces su influyente negocio de televisión seguía siendo su cara más visible al ser el gigante mundial en contenidos en español.

     Hoy en día es una empresa que, si bien no ha abandonado ese negocio, ya no lo controla y mejor enfoca sus esfuerzos en las telecomunicaciones. Cablevisión, su negocio que es mejor conocido por su nombre comercial Izzi, se perfila a concentrar en adelante todos sus esfuerzos sobre Sky, su otra empresa de telecomunicaciones aún existente que está por fusionar con Izzi.

     De esta manera, 54 años después de comprar Cablevisión en 1969, año que comenzó a dar televisión de paga a 300 clientes en la colonia Roma de la Ciudad de México, el servicio se ha extendido a cuatro millones de televisores, 5.7 millones de módems de internet y 5.4 millones de teléfonos fijos, para ser la segunda compañía de telecomunicaciones fijas con mayor cantidad de unidades generadoras de ingresos en México.

     Pero, así como ha emprendido una metamorfosis operativa que parece aún más drástica que cuando se enfocó en la televisión sobre la radio décadas atrás, de manera paralela sus acciones han cambiado su valor, pasando de un máximo histórico de 122.9 pesos en junio de 2015, a 11.1 pesos al cierre de la semana, para una minusvalía de 91%. En ese mismo lapso el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores presenta un crecimiento de 29%, mientras que la caída en las acciones de su competidor Megacable fue de 20% y América Móvil acumula un alza de 8%.

     Dicho de otro modo, Televisa pasó de tener una capitalización de mercado de 19.3 mil millones de dólares, a 1.7 mil millones.

     Para los especialistas de Monex Casa de Bolsa, el comportamiento de los títulos de Televisa es lógico si se toma en cuenta los cambios en la empresa y el comportamiento del mercado.

     "La evaluación a la que ha pagado el mercado este tipo de activos sí es inferior a la que se pagaba históricamente", dijo Brian Rodríguez, analista de Monex, en llamada telefónica. "Normalmente, conforme va evolucionando el mercado, en todos los sectores es diferente el múltiplo al que se evalúan las empresas".

     En ese tiempo, el negocio ha cambiado de manera considerable con una tendencia a simplificar su estructura para optimizar su operación y finanzas y dar un mayor valor a sus accionistas. El primer gran cambio fue la salida de Emilio Azcárraga Jean de la dirección ejecutiva y el arribo de Alfonso de Angoitia y Bernardo Gómez a la dirección, en 2017; seguido de la venta de su interés en Sistema Radiópolis en julio de 2019.

     Pero es en los últimos años cuando aceleró su transformación con la escisión de su negocio de televisión para fusionarlo con socio estadounidense Univision Holding en 2022, y más recientemente con la colocación en bolsa de Ollamani, la empresa surgida de la separación de sus otros negocios, que engloba al equipo de fútbol profesional América, el Estadio Azteca y otros inmuebles, además de casinos y juegos de apuestas.

     "Grupo Televisa se ha caracterizado por sufrir cambios constantes en beneficio de sus diferentes audiencias", dijo Emilio Azcárraga Jean, principal dueño de Televisa y ahora presidente y director general de Ollamani, en el timbrazo de esta empresa a finales de febrero. "Se comprobó en el 91 cuando salimos públicos por primera vez, se ha comprobado con lo que hicimos con Univisión formando TelevisaUnivisión y hoy, con esta oportunidad de sacar los otros negocios que teníamos fuera de telecomunicaciones a la bolsa de valores con el nombre de Ollamani".

     Los pasos implementados por Televisa suelen ser bien recibidos por los inversionistas en el corto plazo, algo evidente con el alza que muestra su cotización en bolsa, la cual, no obstante, suele ser efímera, y de ello hay varios ejemplos.

     Las acciones de Televisa subieron mucho más que el IPC (22.85%) cuando anunció que fusionaría sus activos de contenidos para formar TelevisaUnivision, en abril de 2021, y cuando reveló por primera vez, en octubre de 2022, que planeaba la escisión de la ahora nombrada Ollamani.

     Lo mismo ocurrió cuando la empresa anunció, en su llamada trimestral con inversionistas de octubre de 2023, que dejaría de expandir agresivamente a Izzi para mejor centrarse en la generación de flujo de efectivo y optimización de inversiones.

     "Cuando comenzamos a ver los resultados, vemos que estos no necesariamente son malos, como lo hemos dicho, pero no avanzan al ritmo que el mercado esperaba", consideró Rodríguez como un posible motivo de esta tendencia. "Al final eso termina haciendo que los inversionistas tengan cierta cautela en este tipo de activos".

     El obtener resultados de sus estrategias en un menor tiempo es el principal reto de la empresa a futuro, especialmente ahora que se apresta a fusionar su servicio de televisión satelital Sky --que acordó comprar en su totalidad a su socio AT&T-- con el de cable.

     Dicha fusión, de acuerdo con estimaciones de la propia compañía, le permitiría generar ahorros de hasta 15% de los gastos operativos e inversiones de capital, o por alrededor de 400 millones de pesos en el tercer trimestre de este año, lo que también mejoraría la rentabilidad y márgenes operativos.

     Ello podría generar un beneficio a nivel de flujo operativo que podría traducirse en valor para los inversionistas, de acuerdo con el analista de Monex, quien consideró que más allá de dichos retos, la empresa cuenta con una estructura sólida.

     "Está en una etapa retadora la emisora, retadora en el sentido de retos para tener crecimientos importantes, pero no necesariamente retadora en decir que la estructura financiera sea débil", dijo Rodríguez.

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