La venta de la marca y otros bienes relacionados está en riesgo de no concretarse por las discrepancias que existen por parte de un grupo de 229 sobrecargos jubilados de la empresa. Foto archivo
La venta de la marca y otros bienes relacionados está en riesgo de no concretarse por las discrepancias que existen por parte de un grupo de 229 sobrecargos jubilados de la empresa. Foto archivo

25 de may. (Axis negocios) -- La propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, de adquirir la marca Mexicana de Aviación, hecha a finales del año pasado, revivió en los extrabajadores la esperanza de ver a la que fuera la aerolínea insignia del país surcar los cielos 13 años después de su cese de operaciones. Pero ahora, esa posibilidad podría quedar descartada.

     La venta de la marca y otros bienes relacionados --una operación valuada en 816 millones de pesos (46 millones de dólares)-- está en riesgo de no concretarse por las discrepancias que existen por parte de un grupo de 229 sobrecargos jubilados de la empresa, quienes han promovido una serie de recursos de amparo que mantiene el embargo de bienes de la extinta aerolínea.

     “Estamos entrampados, por así decirlo, porque hay amparos que hacen que no pueda proseguir esta compra que ha querido hacer el gobierno”, dijo Ada Salazar, secretaria general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), en conferencia de prensa. “Para poder llevar a cabo esa compraventa se necesita destrabar esos embargos, para que tengan un beneficio todos los trabajadores”.

     Los recursos fueron promovidos en 2022 por los sobrecargos jubilados, quienes buscan hacer efectivos los laudos favorables que recibieron de las autoridades laborales. Hasta la fecha ninguno de los recursos ha sido resuelto de forma definitiva, algo que podría tomar entre cinco y 10 años, de acuerdo con estimaciones de las organizaciones que representan al resto de los extrabajadores que respaldan la venta de la marca.

     La compra de la marca Mexicana de Aviación fue planteada por el presidente López Obrador a finales del año pasado, como parte de sus planes para el inicio de operaciones de una nueva aerolínea estatal que será operada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

     Los planes del primer mandatario es que la nueva aerolínea --cuya creación fue oficializada hace unos días en el Diario Oficial de la Federación con la razón social Aerolínea del Estado Mexicano-- inicie operaciones en diciembre de este año.

     Para enero de este año, las organizaciones gremiales que representan a los extrabajadores de Mexicana de Aviación llegaron a un acuerdo para le venta de la marca, un simulador de vuelos, dos inmuebles y un centro de adiestramiento.

     Sin embargo, a cuatro meses de ese anuncio la operación no ha sido concretada, por lo que el gobierno federal fijó el 5 de junio como fecha límite para hacerlo, debido a que los recursos considerados para la operación corresponden al Presupuesto de Egresos de la Federación del año 2022, los cuales, por ley, deben ser reintegrados a la Federación en caso de no ser utilizados antes de una fecha determinada.

     Para las organizaciones que representan a más de 99% de los seis mil 500 trabajadores y extrabajadores de Mexicana, la única alternativa para concretar la venta --y con ello la posibilidad del regreso a los cielos de una marca icónica-- es el desistimiento por parte de los extrabajadores inconformes, explicó Fausto Guerrero Díaz, presidente de la Asociación de Jubilados, Trabajadores y ex Trabajadores de la Aviación Mexicana (Ajteam).

     “Hoy tenemos la oportunidad de que Mexicana vuelva a volar y lamentablemente la falta de acuerdo entre los trabajadores puede llevar a traste el que Mexicana no vuelva a volar”, externó.

      Sin embargo, esta posibilidad parece lejana, debido a que la discrepancia principal radica en el esquema de distribución de los recursos obtenidos de la venta, el cual contempla que lo recibido por los extrabajadores sea proporcional al salario que percibían al momento del cese de operaciones.

     Para los sobrecargos jubilados inconformes dicho reparto es injusto, ya que privilegia a grupos de trabajadores que, a diferencia de los jubilados, han contado con trabajo e ingresos durante los casi 13 años que ha durado el proceso laboral de la extinta aerolínea, explicó Iván Hernández, representante del grupo inconforme.

     “No estamos en contra de la venta, que realicen la venta y que hagan la repartición conforme a derecho”, dijo el representante del grupo inconforme, quien apuntó que de hacerse de esa forma, cada uno de los sobrecargos jubilados podría recibir poco más de un millón de pesos.

     Hernández apuntó que en días pasados sostuvieron reuniones con representantes de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, en la que no fue posible conocer el monto que recibirían los extrabajadores por la venta de la marca.

     Por lo pronto, la asociación de sobrecargos convocó a una asamblea general extraordinaria para el próximo lunes, en la que busca explicar la situación a sus agremiados, incluidos los jubilados, para tratar de buscar un acuerdo que permita continuar con la venta.

     Si bien los grupos que respaldan la venta admitieron que lograr el acuerdo será complicado, apuntaron a que insistirán en ello hasta el vencimiento del plazo establecido por el gobierno.

     “Permítame tener esperanzas hasta el último minuto del día 5 de junio”, concluyó la secretaria general de ASSA.

 


Fecha de publicación: 25/05/2023

Etiquetas: Mexicana ASSA aerolínea