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31 de jul. (Axis negocios) -- Los mercados financieros registran un buen desempeño en lo que va del verano, gracias a diversas cifras que hicieron suponer a los inversionistas que el desempeño económico en occidente ha sido resiliente a un entorno de altas tasas de interés y que incluso podría evitarse una recesión, principalmente en Estados Unidos, la mayor economía del planeta.
En julio, el índice industrial Dow Jones ganó 3.4%, siendo su segundo mes de ganancias al hilo; en tanto, el Standard and Poor's (S&P) 500 subió 3.1% y el indicador tecnológico Nasdaq Composite avanzó 4.05%, con ambos referentes ligando su quinto mes de rendimientos positivos.
El Dow recuperó su mejor nivel desde febrero de 2022 y el S&P marcó su puntaje más elevado desde marzo de 2022. El Nasdaq cotiza cerca del mismo récord del S&P.
En México, el índice S&P/BMV IPC ganó 2.4% en julio y el FTSE Biva aumentó 2.2% en el mismo mes, siendo el segundo mejor desempeño para ambos índices bursátiles en lo que va del año.
Los indicadores mexicanos cotizan cerca de su mejor nivel en seis semanas, luego de retroceder el último día del mes.
Los expertos destacan que las bolsas globales han registrado un rally concentrado en pocas emisoras y que han mostrado un buen desempeño financiero en el segundo trimestre del año.
Más de la mitad de las compañías del S&P han reportado resultados y 80% ha rebasado las ganancias por acción esperadas, de acuerdo con FactSet, con una semana en la que todavía habrá informes que podrían mover al mercado, como el de las tecnológicas Amazon y Apple.
“Con un panorama de crecimiento tendiente al optimismo y con la inflación descendiendo, los inversionistas han centrado sus apuestas en activos de riesgo”, escribió Rodolfo Campuzano, Director General de Invex Operadora, en un reporte.
De hecho, la semana pasada, el índice Dow Jones concluyó una racha ganadora de 13 días, que representó su rally más largo de ganancias desde 1987.
Además, los inversionistas se han vuelto cada vez más optimistas sobre un escenario de “aterrizaje suave”, ya que los datos económicos, tanto en México como en Estados Unidos, mostraron una fortaleza continua en el mercado laboral y un enfriamiento de la inflación.
La Reserva Federal, regulador monetario estadounidense, dejó la puerta abierta a subir o no la tasa de interés de referencia en la reunión de septiembre, en la cual el mercado espera que concluya el ciclo de normalización y la discusión se dirija a la duración de las condiciones restrictivas.
Además, el índice de precios con base en el gasto de los consumidores, o PCE, mostró la semana pasada otro mes de desaceleración, siendo uno de los indicadores que más sigue la Fed.
La mejora de las expectativas económicas también ayudaron a que el peso mexicano mantuviera su ventaja sobre la divisa estadounidense por séptimo m es al hilo. En julio, el peso mexicano se apreció 2.4% frente al dólar estadounidense, además de que alcanzó su nivel más fuerte desde finales de 2015, la semana pasada.
“El otro catalizador que impulsó aún más al peso fue la menor aversión al riesgo que parece estar generando la expectativa de que Estados Unidos pudiera evitar la recesión”, escribió Juan Manuel Lozada, analista de Citibanamex, en un reporte donde también destacó que el alto diferencial de tasas entre Estados Unidos y México aún es un factor benigno para la moneda local. “El siguiente soporte de la divisa se ubica en los 16.50 pesos por dólar, nivel que podría tocar en caso de que los mercados continúen mostrando sesiones de optimismo y menor aversión al riesgo”.
La mejora de las expectativas económicas en varias partes del mundo también ayudó a que los precios del petróleo registraran ganancias de dos dígitos y el más alto desde enero de 2022 o en año y medio.
En el séptimo mes del año, el precio del contrato de septiembre del barril de petróleo estadounidense, o West Texas Intermediate (WTI), ganó 15.8% a 81.80 dólares, mientras que el precio contrato de septiembre del crudo del Mar del Norte, o Brent, subió 12.7% para cerrar en 84.99 dólares.
Si bien un mejor panorama de la economía favorece a que los bancos centrales sigan elevando sus tasas de interés, mismas que aumentan los costos de endeudamiento, desaceleran el crecimiento y reducir la demanda de petróleo, la expectativa de que los grandes productores de crudo en el mundo sigan reduciendo su oferta global ha sido un factor de equilibrio.
Arabia Saudita, uno de los tres mayores productores de crudo en el mundo y líder facto de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP), podría extender hasta septiembre su recorte voluntario de producción de petróleo de un millón de barriles por día.
Además, el viceprimer ministro ruso, Alexander Novak, dijo hace un mes que Rusia recortará las exportaciones de crudo en 500 mil barriles diarios en agosto.
"El mercado ha abandonado su pesimismo sobre el crecimiento", escribieron Daan Struyven y su equipo de economía energética de Goldman Sachs, en un reporte. “Los precios del petróleo han subido desde mediados de junio debido a la vuelta a los déficits y al abandono del mercado petrolero de sus perspectivas de crecimiento negativo, que consideramos demasiado pesimistas".
Esta semana, además de los reportes trimestrales, los inversionistas incorporarán importantes datos como la nómina no agrícola y la tasa de desempleo estadounidense, que completarán el panorama esperado de política monetaria.
Durante el mes, con base en los componentes del S&P 500, todos los sectores cotizaron al alza, liderados por energía (7.3%), telecomunicaciones (4.7%) y financieras (4.7%).
Fecha de publicación: 31/07/2023
Etiquetas: Flujos Mercados Bolsas México BMV Biva EUA Inflación Fed