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7 de oct. (Axis negocios) -- La Autoridad Investigadora (AI) de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) determinó que, de manera preliminar, el mayor fabricante de productos a base de maíz en el mundo, Gruma, debe vender cinco plantas de producción de harina de maíz nixtamalizado para así establecer mayores niveles de competencia en México.
La Autoridad investigadora identificó que Gruma tiene entre 50 y 90% de las ventas en las ocho regiones que Cofece dividió al país para este análisis, lo que quiere decir que incluso hay regiones en las que casi nueve de cada 10 kilos de harina son vendidos por la empresa mexicana, esto tras un estudio de las ventas totales y la capacidad instalada de las compañías entre 2016 y 2022.
El órgano responsable de regular el buen funcionamiento de los mercados señaló que Gruma cuenta con una participación de mercado con brechas de 22 a 80 puntos porcentuales mayor que su más grande competidor en cada una de las regiones, así como un precio promedio casi 10% mayor que el de sus competidores a nivel nacional.
“De tal manera, la AI identificó que Gruma mantiene una ventaja significativa e irreversible frente a todos sus competidores que le permite establecer precios elevados sin que otras empresas puedan hacerle competencia suficiente”, dijo el organismo antimonopolios, en un comunicado.
Cofece solo identifica un competidor relevante para Gruma, que es Grupo Minsa, empresa pública con sede en Tlalnepantla, Estado de México, que es presidida por Altagracia Gómez Sierra, cercana a la presidenta Claudia Sheinbaum y que lidera el consejo empresarial que la asesorará.
De acuerdo con la Autoridad Investigadora, Minsa solo es un competidor relevante para Gruma en uno de los ocho mercados, con una participación que osciló entre 40 y 45%. En otros mercados su participación rondó entre 10 y 22%, de acuerdo con un extracto del dictamen preliminar.
Otros competidores con “presencia marginal” identificados por Cofece son Grupo CMG, Harinera Panamericana y Maximasa del Centro.
Además, el órgano investigador de la Cofece propuso que la venta de las cinco plantas debe incluir la flota de distribución y fuerza de ventas de dichas plantas.
Gruma, que confirmó en un comunicado la notificación del dictamen preliminar, especificó que se trata de cinco de 18 molinos de harina de maíz nixtamalizado en México, propiedad indirecta de la compañía, ubicados en Chalco, Culiacán, Río Bravo, Veracruz y Celaya, que serían los posibles activos a desincorporar, mediante su venta en un plazo máximo de dos años y conforme a un cronograma de implementación que iniciaría a partir de que quede firme la resolución del pleno de la Cofece, en caso de que se agoten todos los medios de defensa disponibles para la empresa conforme a derecho.
Para Gruma, México representó 28% de todas sus ventas en el segundo trimestre de 2024 y 20% de su flujo operativo. Además de la venta de harina de maíz, Gruma ha tratado de robustecer su posición en el mercado para consumidores finales, bajo su marca Mission.
La Autoridad Investigadora de Cofece también señaló que la empresa mexicana cuenta con estrategias específicamente diseñadas para dificultar que los tortilleros puedan cambiar de proveedor, incluso el organismo indicó que comenzó la investigación al encontrar un incremento constante en los precios de harina de maíz, a pesar de que el precio de su principal insumo, el maíz, se mantenía estable.
Como parte de la solución para reactivar la competencia, la propuesta incluye que elimine las estrategias mencionadas y que implemente mecanismos de transparencia y supervisión, “con el fin de que haya mayor competencia en el mercado”.
La compañía mexicana enfrentó, durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, señalamientos por incrementar los precios de la harina de maíz nixtamalizado, en medio de medidas que emprendió la administración como el Paquete Contra la Inflación y Carestía, o Pacic, un instrumento de la Federación que entre otras cosas intentó comprometer a diversas empresas a no incrementar el precio de productos de la canasta básica en 2022.
En enero de este año, Gruma dijo que no subirá el precio de su harina de maíz y que comercializa bajo la marca Maseca en 2024, de acuerdo con lo informado por el propio exmandatario.
El foco en los precios en ese insumo ocurre cuando la tortilla de maíz es un alimento básico para los mexicanos, ya que 68% lo consume diariamente, de acuerdo con datos al 2017 de Profeco, citados por Cofece.
A su vez, la tortilla de maíz acapara casi 6% del gasto en alimento de los hogares, según datos al 2022 de Inegi.
Pero Cofece también enfrenta señalamientos de la Federación, al menos de la administración anterior que veía en los organismos autónomos un gasto innecesario, aunque la medida ha sido criticada por Estados Unidos y Canadá, socios comerciales de México a través del T-MEC.
En agosto de este año, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el dictamen que, en esencia, contempla la desaparición de siete órganos autónomos, entre ellos la propia Cofece, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).
Luego que la Autoridad Investigadora de Cofece dijera que “no existen condiciones de competencia efectiva en los mercados de producción, comercialización y distribución de harina de maíz blanca y azul a granel dirigida para la elaboración comercial de tortillas de harina de maíz, con una dimensión geográfica regional (mercados relevantes), por la probable existencia de una barrera a la competencia y libre concurrencia”, Gruma dijo que analizaría el contenido.
“El actuar de la compañía siempre se ha conducido dentro del marco de la ley, Gruma ha colaborado abiertamente y de buena fe con la Cofece desde el inicio de la investigación del mercado investigado, y seguirá colaborando de la misma forma a fin de hacer valer dentro del plazo legal de 45 días hábiles, los derechos y recursos legales que le otorgan la Constitución y las leyes aplicables”, dijo la empresa regia en un comunicado.
La conclusión de la Autoridad Investigadora de la falta de competencia y su propuesta para solucionarlo no implican que de manera inminente Gruma tenga que proceder. Toca que Gruma y otros interesados presenten argumentos y pruebas para que después el Pleno de la Cofece analice la evidencia y emita una resolución, lo que implica que aún se puede adoptar, modificar o rechazar las propuestas de la Autoridad Investigadora, por lo que Gruma no está obligada, hasta ahora, a implementar las medidas correctivas propuestas.
Tras la noticia, las acciones de Gruma presentaron una caída de 7.56% en la Bolsa Mexicana de Valores a 334.26 pesos, lo cual representa su nivel más bajo desde el 26 de abril de 2012, cuando la baja fue de 7.96%.
Para los analistas de Monex Casa de Bolsa todavía es temprano para sacar conclusiones a falta de buena parte del proceso.
“Pese a que en el corto plazo esta noticia implicará volatilidad en el precio de la acción, eventos similares siempre han creado un entorno de negociación y apertura entre el organismo y las emisoras. Será clave conocer algún comentario en la próxima conferencia de resultados al tercer trimestre de 2024”, escribieron en un reporte Janneth Quiroz, J. Roberto Solano y Brian Rodríguez, analistas de Monex.
Fecha de publicación: 07/10/2024
Etiquetas: Gruma alimentos consumo Cofece