Bolsas y peso cierran con cautela --cerca de su peor nivel del año-- por elección EUA

5 de nov. (Axis negocios) -- Los mercados en México cerraron la jornada del martes con aparente tranquilidad, sin variaciones muy significativas, justo antes que se materialice uno de sus principales elementos de incertidumbre: la elección presidencial estadounidense.

     El segundo día se la semana el peso concluyó con apreciación de 0.4%, mientras que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y la Bolsa Institucional de Valores (Biva) marcaron ligeros descensos (menores a 0.2%).

     La elección estadounidense ha inyectado más incertidumbre de lo habitual ante la posibilidad de que el candidato republicano Donald Trump, quien desde hace años ha mostrado una actitud de antagonismo con las actuales condiciones de comercio y migración con México, vuelva a la Casa Blanca.

     El empresario convertido en político, que podría convertirse en el primer mandatario en ejercer dos periodos separados, ya significó presión sobre el país en su mandato anterior sobre temas migratorios y obligó a la renegociación del tratado de libre comercio de ambas naciones con Canadá.

     De ahí que su potencial regreso es visto como uno de los principales obstáculos para el desempeño de la economía nacional en los años que vienen.

     “Los mercados financieros se ven afectados por eventos políticos como las elecciones presidenciales”, escribió Paulina Anciola, analista de Citibanamex, en un reporte especial el lunes. “Aunque en ocasiones es difícil aislar los efectos de un evento particular, se ha observado que las elecciones presidenciales mexicanas y en Estados Unidos desde 2016 han tenido un impacto sobre los mercados financieros, particularmente sobre el cambiario”.

     Si bien algunos desde México veían a Trump como alguien conocido y que podría generar menos volatilidad que hace ocho años, cuando alcanzó la presidencia por primera vez, esto no ocurrió así.

     En su cerrado enfrentamiento con la demócrata Kamala Harris --que tomó la candidatura de forma menos planeada tras la presión que pesó sobre el actual presidente Joseph R. Biden para abandonarla--, ha vuelto a dirigirse directamente contra México.

     Entre sus más recientes amenazas están la de imponer aranceles de entre 100 y 200% a los vehículos fabricados en México, sobre todo por compañías de origen chino, o la imposición de aranceles de 25% a todas las exportaciones de México si el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum no frena el paso de migrantes en la frontera entre los dos países.

     Aunque sus propuestas no encajan con lo establecido por el tratado de libre comercio de Norteamérica, conocido aquí como T-MEC, de materializarse estas propuestas podrían tener consecuencias adversas para México, cuyas exportaciones se dirigen en 80% al país vecino del norte.

     Es por ello que la aparente tranquilidad del martes en los mercados solo fue reflejo de una posibilidad que tiene semanas descontándose.

     El peso, que viene de cuatro bajas semanales seguidas, cerró por sexto día consecutivo por arriba del nivel psicológico de las 20 unidades por dólar y está muy cerca de su peor nivel en 25 meses, el cual marcó apenas el viernes.

     En tanto, el S&P/BMV IPC, el índice más representativo de la renta variable local, perdió terreno en 11 de los últimos 14 días y cotiza muy cerca de su peor nivel en un año, marcado la semana pasada.

     Y pese a que una eventual victoria de Trump está al menos parcialmente descontada, la volatilidad no frenaría.

     Janneth Quiroz, Roberto Solano y André Maurin, analistas de Monex Casa de Bolsa, estiman que el peso cotizará en un rango de entre 19.70 y 21.14 unidades por dólar ante un resultado favorable al republicano, y de entre 21.14 y 22.26 si además es acompañado por el control de la mayoría en el Congreso.

     Por su parte, el peso regresaría a entre 18.80 y 19.40 unidades ante una victoria de Harris, mientras que podría alcanzar 18.30 unidades si los demócratas alcanzan mayoría en el Congreso, un escenario que la correduría ve poco probable.

     “Como hemos observado a nivel mundial, en los más recientes procesos electorales, los mercados mantienen cierta calma antes de las elecciones”, escribieron los especialistas de Monex hace dos semanas. “Sin embargo, dependiendo de los resultados, la volatilidad se puede elevar significativamente”.

     Tras la sorpresiva victoria de Trump en 2016 el peso se depreció 7.9%, mientras que 10 días después el recorrido negativo alcanzó 11%. La moneda recuperó su nivel previo al evento hasta junio de 2017.

     La entonces solitaria BMV perdió tras las elecciones estadounidenses de hace ocho años 2.2%, mientras que 10 días después la baja alcanzó 6.8%. La bolsa se recuperó en febrero de 2017.

     Claro que la jornada electoral de Estados Unidos no es el único elemento de incertidumbre actual para los mercados de México y es probable que una victoria de Harris no haga que las bolsas o el peso viren a un 2024 positivo.

     La desaceleración económica tanto en el país como internacional se está materializando y aún existen muchas dudas sobre los procesos de normalización monetaria, además de los efectos económicos de las guerras en Medio Oriente, entre los factores principales.

     Además, los inversionistas están pendientes de la discusión en la Suprema Corte de Justicia de la Nación de un proyecto para declarar la invalidez de la reforma al poder judicial que ordenaría la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular, algo que ha generado nerviosismo porque a juicio de especialistas y representantes de la iniciativa privada podría restar independencia a los impartidores de justicia en México.