Boeing su primera huelga en 16 años y detiene la producción del 737

13 de sep. (Axis negocios) -- The Boeing Company, el mayor fabricante de aeronaves de Estados Unidos, enfrenta su primera huelga en 16 años, la cual afecta la producción de sus equipos, incluido el Boeing 737 MAX, uno de los dos más solicitados por las aerolíneas comerciales y que en los últimos años ha enfrentado problemas que han retrasado su producción.

     Los 33 mil trabajadores sindicalizados afiliados al International Association of Machinists and Aerospace Workers (IAM) rechazaron la oferta de la compañía, por lo que se fueron a huelga desde el primer minuto del viernes 13 de septiembre, abandonando sus puestos de trabajo en los centros de ensamble de Seattle y Portland, las dos ciudades más importantes al norponiente de Estados Unidos.

      “Los miembros de IAM de toda América del Norte se solidarizan con nuestros miembros del noroeste del Pacífico y California. Nuestro objetivo es conseguir un contrato sólido que satisfaga las necesidades de nuestros miembros”, dijo el sindicato en un comunicado.

      La decisión de iniciar una huelga fue tomada luego de que 95% de los empleados sindicalizados rechazaran un acuerdo laboral que contemplaba, entre otras cosas, incrementos salariales anuales de 25% por cuatro años, en lo que fue denominado por directivos de la compañía como “el mejor contrato que hemos presentado jamás”.

     Con el inicio de la huelga, las acciones de Boeing cerraron la jornada con una caída en la Bolsa de Valores de Nueva York de 3.7% a 156.77 dólares cada una, aunque en la sesión tras el cierre del mercado subían 0.15%.

     Las estimaciones del impacto financiero que tendrá la huelga dependerán de cuánto dure, pero en un escenario de 30 días de paro de actividades, las consecuencias rondarían mil 500 millones de dólares para el fabricante estadounidense, de acuerdo con CNBC News.

     Además, representa un obstáculo más para las aerolíneas en la formación de sus flotas, la mayoría relacionados con problemas en el control de calidad en las líneas de ensamblaje del fabricante norteamericano.

     El último de estos problemas fue la puesta en tierra, por algunas semanas, de los aviones 737 MAX-9 en operación luego de que uno de los equipos, operados por Alaska Airlines sufrió el desprendimiento de una puerta en pleno vuelo. Esto no solo afectó a varias decenas de aerolíneas a nivel mundial, sino a la línea de ensamblaje tras un mayor escrutinio de los reguladores aéreos de Estados Unidos.

     Pero el mayor problema para este tipo de aviones sucedió en 2019, cuando dos accidentes fatales de aviones 737 MAX-8 en un lapso menor a seis meses por un fallo de software obligaron a una inspección rigurosa por parte de los reguladores estadounidenses obligó a suspender la operación --y la manufactura de dicho modelo-- por casi dos años, lo que representó pérdidas de miles de millones de dólares para Boeing, así como un duro golpe a su reputación.

     En el caso de México, AeroMéxico tiene en los Boeing 737 a la columna vertebral de su flota. En la actualidad, de los 157 equipos con que cuenta, 60 de ellos corresponde a la línea MAX, que es la más moderna, y en los próximos tres años prevé incorporar 25 equipos más.

     Consultada por Axis negocios la aerolínea del “caballero Águila” descartó dar estimaciones sobre el impacto que tendría la huelga de Boeing en su flota, pero confió en que se resuelva pronto.

     Pero Boeing no es el único que enfrenta problemas en la industria aeronáutica, pues su principal competidor, el fabricante francés Airbus, también atraviesa complicaciones por la revisión anticipada de motores hecha por el fabricante Pratt & Whitney, utilizados en cientos de sus equipos fabricados entre 2015 y 2021.

     Dicha revisión ha obligado a casi medio centenar de aerolíneas de todo el mundo a poner en tierra parte de su flota, y las estimaciones son que la revisión --que inició a finales de 2023-- podría finalizar en 2025 e incluso extenderse hasta 2026.

     Esto ha afectado no solo a las aerolíneas mexicanas, Volaris y Viva Aerobus, las dos más importantes con un modelo de negocio de ultrabajo costo, en su tráfico de pasajeros, sino a las compañías que administran los aeropuertos en México, como los grupos aeroportuarios privados del Sureste (Asur), del Pacífico (GAP) y del Centro Norte (OMA), que han reportado disminuciones en su operación a lo largo del año.