La renovación del ejecutivo y el Congreso en México pesó en los mercados locales, aunque no explicó por completo su comportamiento. Foto archivo
La renovación del ejecutivo y el Congreso en México pesó en los mercados locales, aunque no explicó por completo su comportamiento. Foto archivo

28 de jun. (Axis negocios) -- Las bolsas de valores de México y el peso cerraron el segundo trimestre de 2024 como uno de los peores tres meses de los últimos años, un desempeño que estuvo motivado por el resultado de la elección federal, con Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) manteniendo la Presidencia y arrasando, junto con sus aliados, en el Congreso de la Unión, obteniendo dos de cada tres diputados y senadores, lo que conlleva un poderío que los participantes de los mercados ven con recelo.

     Los principales índices bursátiles, el S&P/IPC y el FTSE Biva, cayeron más de 8% de abril a junio, convirtiendo al trimestre en el peor de los últimos dos años. Sin la baja de junio, que fue de 5%, los indicadores aún estarían lejos de los máximos en los que sí cotiza Wall Street, ya que abril y mayo también cerraron con caídas.

     “Sí hay más factores”, dijo en entrevista Ramsé Gutiérrez, co-director de inversiones del operador de fondos de inversión Franklin Templeton en México. “Ya veníamos desde el primer trimestre hablando de una desaceleración económica que, ante la mayor incertidumbre, genera menores expectativas de crecimiento económico y por ende, posiblemente afectaciones a las utilidades de las empresas en el sentido de que no haya tanto consumo, o que haya menos inversión y por ende, menos crecimiento en algunas de ellas”.

     El país va de la mano con una tendencia global de desaceleración económica para 2024, incluso pese a las altas expectativas que ha generado la relocalización de cadenas de suministro, o nearshoring, que podría tener un impacto de varios años.

     Otro factor que tienen en contra las bolsas de México es la ausencia de un sector tecnológico, el cual, ante las expectativas de la inteligencia artificial, ha impulsado gran parte del apetito por riesgo en Estados Unidos, por lo que el Nasdaq Composite y S&P están a menos de 1% de sus máximos, mientras que el Dow Jones, con más presencia de sectores cíclicos como industriales y energía, está 2.2% debajo de su puntaje sin precedentes.

     Además, no ha desaparecido de las bolsas la incertidumbre sobre el panorama monetario, particularmente sobre el actuar de la Reserva Federal (Fed) estadounidense.

     A finales de 2023 se esperaba que la Fed emprendiera la baja de tasas de interés incluso desde el primer trimestre del año, sin embargo, a partir de una inflación que tarda en ceder y un mercado laboral fuerte, ahora el mercado especula sobre una o dos bajas hacia finales del año.

     Ese mismo elemento también ha pesado sobre la cotización del peso, ya que tasas de interés más altas por más tiempo han devuelto atractivo al dólar, que esta semana, en términos del índice DXY, tocó máximos desde noviembre.

     De esta forma la moneda cayó 7.4% en junio y 9.6% en el segundo trimestre, constituyendo el peor mes y el peor trimestre, respectivamente, desde los albores de la pandemia a comienzos de 2020.

     El peso también ha enfrentado las perspectivas de un mayor déficit fiscal en México, la desaceleración en la recepción de remesas y un banco central que, aunque ha mostrado cautela con pausas en sus decisiones de tasas de interés, probablemente lleve a cabo recortes en el año que reducirán el diferencial con países desarrollados, como Estados Unidos.

     Claro que en tanto las tasas no bajen continúan convirtiendo a los instrumentos de deuda nacional en un gran atractivo.

     “Somos el único país con grado de inversión que te paga un doble dígito en su tasa de referencia”, dijo Gutiérrez, al argumentar que la tasa de los bonos gubernamentales mexicanos está por encima de 5% tras descontar la inflación.

     La divisa local también podría ser susceptible a la carrera presidencial estadounidense, donde el ex mandatario Donald Trump, que obligó a una renegociación de la relación comercial de México con Estados Unidos, busca un segundo periodo.

     Aunque las expectativas sobre el próximo gobierno no expliquen por completo el comportamiento de las acciones y la moneda, seguirá como elemento de volatilidad, ante el potencial manejo de las finanzas públicas y las reformas que pueda emprender, pese a lo que Franklin Templeton tiene una perspectiva positiva.

     “Yo creo que [el resto del año] va a ser favorable, porque ahorita si bien el escenario base sigue siendo de una concentración de poder, estar concentrando en una persona que da la pinta de ser una persona más sensata”, agregó Gutiérrez. “Yo diría que de manera favorable vamos a ver los índices y las acciones mexicanas hacia finales de año, pero sí es una cosa que todavía va a ser sensible a varios factores”.

 


Fecha de publicación: 28/06/2024

Etiquetas: BMV Biva México mercado peso divisas caída trimestre comportamiento elecciones Fed