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4 de mar. (Axis negocios) -- El gobierno de México dijo que el país responderá con medidas arancelarias y no arancelarias a la imposición de tarifas generalizadas de 25% por parte de Estados Unidos, con lo que aumenta el riesgo de una guerra comercial que tendría un impacto económico negativo para ambas naciones.
Las posibles represalias serán anunciadas en un evento público el domingo 9 de marzo, en el Zócalo de Ciudad de México, dijo la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum en su conferencia matutina diaria.
La mandataria rechazó el comunicado publicado por la Casa Blanca publicado el lunes para anunciar los aranceles de 25% en contra de México y Canadá, además de una tarifa adicional de 10% a China, al considerarlo difamatorio por sugerir que las autoridades mexicanas protegen a los grupos del crimen organizado. Por el contrario, destacó los progresos alcanzados recientemente en el combate al tráfico de fentanilo.
“No hay motivo, razón ni justificación que soporte esta decisión, que afectará a nuestros pueblos y naciones”, dijo en su conferencia. “Hemos decidido responder con medidas arancelarias y no arancelarias”.
Sheinbaum agregó que la política implementada por el gobierno estadounidense afectará a las empresas nacionales y extranjeras que operan en México, aunque dijo que el impacto más negativo lo resentirá ese país porque provocará un repunte inflacionario, algo que incluso reconoció el secretario de Comercio, Howard Lutnick, al menos para el corto plazo.
Lutnick dijo este martes que México y Canadá se acercaron a él para demostrar que están haciendo un mejor trabajo contra el fentanilo, por lo que el mandatario estadounidense Donald J. Trump podría anunciar un acuerdo con ellos tan pronto como el miércoles, aunque descartó que se trate de una pausa o una suspensión de las cuotas.
Por su parte, Sheinbaum aclaró que las puertas ‘siempre están abiertas’ para el diálogo, por lo que continuarán las conversaciones con el equipo de Trump para buscar una ‘solución negociada’ que detenga el cobro de este impuesto que entró en vigor el primer minuto de este 4 de marzo.
“No queremos entrar a una guerra comercial; eso solo afecta a la gente”, dijo Sheinbaum a los representantes de medios en Palacio Nacional.
Además, la presidenta dio a conocer que sostendrá una nueva llamada con su homólogo estadounidense, probablemente el jueves, en la que definirá si procede con el plan de respuesta previsto para el domingo.
El riesgo de un intercambio de aranceles se produce en un momento en que la región de Norteamérica se supone que busca fortalecer su cooperación económica y comercial para hacer frente a la competencia de China, en parte debido a las demandas del propio Trump, quien considera que se deben cerrar las puertas a productos e inversiones de la nación asiática porque afectan a los productores estadounidenses y ponen en riesgo la seguridad nacional.
De hecho, Trump dijo que buscará renegociar el tratado comercial de Norteamérica (conocido aquí como T-MEC) en 2026, precisamente para evitar que China y otros países utilicen a México y Canadá como trampolín para exportar sus productos hacia la Unión Americana.
Sin embargo, una guerra de aranceles podría socavar los esfuerzos para promover dicha integración. Sheinbaum recordó que al aplicar una tasa de 25% a las exportaciones mexicanas “se está violando el tratado comercial”, mientras que el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció que su país denunciará a Estados Unidos ante la Organización Mundial del Comercio y presentará otro recurso de inconformidad en el marco del T-MEC.
A diferencia de México, Canadá respondió de inmediato con tarifas recíprocas de 25% contra importaciones procedentes de la Unión Americana por hasta 155 mil millones de dólares canadienses, las cuales comenzaron a aplicarse este martes para los primeros 30 mil millones. Por su parte, China decretó un impuesto adicional de hasta 15% para distintos productos agropecuarios estadounidenses a partir del 10 de marzo.
Las acciones retaliatorias no fueron bien recibidas por Trump, quien volvió a referirse a Trudeau como ‘gobernador’ --porque en su retórica considera que Canadá debería anexarse a Estados Unidos-- y amagó con una nueva escalada del conflicto arancelario.
“Por favor, explíquenle al gobernador Trudeau, de Canadá, que cuando imponga un arancel de represalia a los Estados Unidos, ¡nuestro arancel recíproco aumentará inmediatamente en una cantidad similar!”, escribió el político de 78 años en su cuenta de la red Truth Social.
Al mismo tiempo, organismos empresariales de México y Estados Unidos advirtieron sobre el impacto desfavorable que tendrán los aranceles y que muy probablemente se verá reflejado en precios más altos para los consumidores.
“Imponer aranceles a un sistema de coproducción sería contraproducente”, dijo American Chamber of Commerce Mexico, en un comunicado. “Lo hemos visto desde la reacción instantánea de los mercados, el miedo de los productores pequeños y medianos, hasta el aumento previsible de los precios de los automóviles y la inflación”.
Empresas estadounidenses como Target y Best Buy ya advirtieron que podría haber un aumento en costos tan pronto como esta semana, debido a la alta dependencia que tienen de la proveeduría mexicana y china, mientras que el sector de autopartes en México, que depende en gran medida de las exportaciones hacia el país vecino del norte, estimó un sobrecosto de 30 mil millones de dólares tras la decisión de Trump.
Otros, como American Society of Mexico (Amsoc), hicieron un llamado a fortalecer la cooperación y el diálogo bilateral, pues consideran que la administración de Sheinbaum ha avanzado para combatir el narcotráfico y la migración indocumentada --dos temas clave para Estados Unidos--, pero aún se requieren mayores esfuerzos.
“En Amsoc también advertimos que estas medidas complican el entorno para la próxima revisión del T-MEC, el cual ha sido clave para la competitividad de la región”, dijo el organismo en un comunicado. “En este sentido, subrayamos la importancia de mantener un enfoque proactivo y colaborativo para evitar retrocesos que perjudiquen el bienestar económico de ambas naciones”.
El gobierno mexicano había sorteado la política arancelaria de Estados Unidos por un mes, luego de una primera conversación telefónica entre Sheinbaum y Trump que evitó la entrada en vigor de las tarifas el 4 de febrero.
Ambos gobiernos llegaron a un acuerdo de cooperación para frenar el tráfico de fentanilo a través de la frontera compartida. México se comprometió al envío de 10 mil elementos de la Guardia Nacional para reforzar la seguridad en dicha zona, mientras que Estados Unidos ofreció atacar el tráfico de armas hacia su vecino.
El diálogo bilateral en materia de seguridad ha continuado desde entonces. Sheinbaum incluso compartió una serie de datos para demostrar que su gobierno sí logró reducir los flujos de fentanilo hacia territorio estadounidense, por lo que le extrañó que Trump tomara la decisión ‘unilateral’ de imponer los aranceles de todas formas.
La víspera, el mandatario dijo que no había margen para postergar nuevamente la aplicación de las cuotas, ya que ninguno de sus dos socios en Norteamérica hizo lo necesario para contener el trasiego de drogas.
El comunicado compartido ayer por la Casa Blanca mencionó además que los cárteles “operan sin obstáculos debido a una relación intolerable con el gobierno de México”, algo que Sheinbaum negó rotundamente.
Tras la puesta en marcha de las cuotas y los comentarios de la presidenta, el tipo de cambio reaccionó negativamente y cotizó cerca de las 21 unidades por dólar --su nivel más débil en tres años--, aunque después recuperó terreno y se apreció hasta las 20.64 unidades.
En tanto, las bolsas en México cerraron en territorio de corrección luego de caer más de 10% desde sus últimos máximos. En Estados Unidos, los índices Dow Jones Industrial Average y Standard & Poor’s 500 cerraron con pérdidas mayores a 1%, mientras que el Nasdaq Composite se quedó cerca de la corrección.
Trump aún tiene planes de imponer otras tarifas para el acero, el aluminio, los autos y los productos agrícolas, además de aranceles recíprocos contra países que le cobren al suyo, los cuales entrarían en vigor durante marzo y abril.
* Dassaev Rodríguez contribuyó a la elaboración de esta historia.
Fecha de publicación: 04/03/2025
Etiquetas: Sheinbaum aranceles EUA economia