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6 de feb. (Axis negocios) -- La Junta de Gobierno de Banco de México aprovechó las condiciones de desinflación en el país y una menor incertidumbre en el frente externo para aplicar un recorte de 50 puntos base a su tasa de interés de referencia, con lo que la ubicó en 9.5%, al tiempo que abrió la puerta a implementar ajustes similares en sus próximas reuniones.
La decisión se tomó por mayoría de cuatro a uno con el voto disidente del subgobernador Jonathan Heath, quien prefería una reducción de solo un cuarto de punto porcentual. Además, se tomó con los cinco integrantes de la Junta, después de que el Pleno del Senado ratificó a José Gabriel Cuadra como el nuevo subgobernador del banco central por un periodo de siete años, en relevo de Irene Espinosa.
El consenso de analistas encuestados por Citi ya esperaba este movimiento. De hecho, en la encuesta publicada el miércoles cambiaron su visión de último momento después de pronosticar un recorte de 25 puntos base desde principios de este año.
La baja aplicada este jueves fue la primera de medio punto porcentual desde agosto de 2020, cuando la economía mexicana se desplomó por el impacto de la pandemia de covid-19, y llevó la tasa objetivo a su menor nivel desde septiembre de 2022.
“La Junta de Gobierno estima que hacia delante podría continuar con la calibración de la postura monetaria y considerar ajustarla en magnitud similar”, dijo la autoridad monetaria en un comunicado. “Prevé que el entorno inflacionario permita seguir con el ciclo de recortes a la tasa de referencia, si bien manteniendo una postura restrictiva”.
La visión de Banco de México se basa en lo que considera un avance “significativo” para controlar el episodio inflacionario que se desató tras la pandemia y que le obligó a emprender un ciclo alcista de la tasa de interés durante casi dos años.
Ahora el combate a la inflación se encuentra en una nueva etapa en la que parece posible llevarla desde los niveles actuales --que están alrededor de los promedios históricos previos a la emergencia sanitaria-- hasta el objetivo puntual de 3% que persigue el banco central, algo que posiblemente demandará niveles de tasas más bajos, de acuerdo con el comunicado de la Junta que los analistas calificaron como dovish o más laxo, pese a que aún hay riesgos en el horizonte.
“Un entorno inflacionario complejo sugeriría calibrar con cautela la postura monetaria, si Banxico realmente desea llevar la inflación al 3%”, dijo Alejandro Saldaña, economista en jefe de Ve por Más. “No obstante, con el alto nivel de la tasa real ex-ante (6.3%) y el tono laxo de la guía futura del comunicado, prevemos más recortes a la tasa objetivo en los próximos meses”.
De hecho, el Instituto Central reafirmó su pronóstico de que la inflación volverá a su meta de 3% hacia el tercer trimestre de 2026, mientras que para el cierre de este año estima un alza de 3.3%.
Las últimas lecturas mostraron un menor avance de los precios al consumidor, ya que al cierre de 2024 crecieron a una tasa anual de 4.21%, la más baja para un periodo similar desde 2020, y siguieron desacelerando en la primera mitad de enero.
El dato de todo el mes se publicará mañana y es posible que la inflación se sitúe dentro del rango de tolerancia del Instituto Central --que va de 2 a 4%-- por primera vez desde febrero de 2021, lo que daría más argumentos para mantener el ritmo actual de recortes de tasas en las próximas decisiones.
“Seguimos anticipando recortes continuos en la primera mitad del año, incluyendo otro de 50pb en marzo, y seguimos proyectando la tasa de interés para el cierre de este año en 7.75%”, escribieron Iván Arias y otros economistas de Banamex, en un reporte. El consenso tiene un pronóstico menos optimista, pues cree que la tasa se ubicará en 8.5% a finales de 2025.
Otro factor determinante es la desaceleración de la economía, que el año pasado registró su menor avance en lo que va de la pospandemia y posiblemente seguirá debilitándose en 2025. Si bien impulsar el crecimiento económico no es una tarea del banco central, sí es un tema al que presta atención especialmente por los efectos que puede tener para el control de los precios.
En las últimas semanas algunos especialistas reconocieron que el margen para un recorte más agresivo a la tasa podía reducirse si Donald J. Trump, el presidente de Estados Unidos, seguía adelante con su política de aranceles contra las importaciones mexicanas, ya que generaría volatilidad en los mercados y pondría en riesgo el control de la inflación. No obstante, dicho temor quedó disipado después de que la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum acordó con Trump pausar los aranceles por 30 días, algo que el banco central no pasó por alto.
“El peso mexicano operó en un rango amplio, sin exhibir una clara tendencia y manteniendo un comportamiento ordenado”, dijo la Junta de Gobierno. “Ante el anuncio de imposición de aranceles, presentó una depreciación importante que se revirtió una vez establecido el acuerdo de pausar su entrada en vigor”.
Aun así, los funcionarios reconocieron que los anuncios de la administración de Trump añadieron incertidumbre a sus previsiones y que, en caso de concretarse, podrían presionar la inflación en ambos lados del balance.
Fecha de publicación: 06/02/2025
Etiquetas: Banxico recorte tasa política monetaria inflación economía