Fibra Infraestructura México lista plan para salir a Biva, ¿dejará BMV?

23 de abr. (Sentido Común) -- Fibra Infraestructura México, un fideicomiso que planea invertir en sectores de hidrocarburos, energía e infraestructura, decidió inscribir su programa de emisión de fibras E --fideicomisos de inversión para proyectos de energía e infraestructura-- en la nueva Bolsa Institucional de Valores (Biva), lo que podría suponer un viraje en su estrategia en cuanto a la bolsa de valores que utilizará para llevar a cabo una potencial oferta pública inicial.

     La fibra E cuenta con un programa autorizado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), el órgano que regula el sector financiero mexicano, para recabar hasta 50 mil millones de pesos (dos mil 647 millones de dólares) desde agosto de 2017, mismo mes en que lo inscribió en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), sin que el proceso registre avances tras el año y medio transcurrido.

     Incluso, el prospecto definitivo publicado en las dos bolsas es exactamente el mismo. Ahora la empresa puede emitir en cualquiera de las dos bolsas de valores mexicanas.

     “Nuestra visión es crear vehículos de inversión competitivos y líderes en la adquisición, consolidación, operación y promoción de activos destinados principalmente a las actividades permitidas, con una plataforma operativa flexible y eficiente en la gestión integral de los activos para dar mayor rendimiento a nuestros inversionistas”, escribió la fibra en su programa.

     Aunque los documentos públicos sólo dan cuenta del programa de emisión en Biva, mas no de una colocación, el registro podría significar que la empresa reactivó su plan para colocar fibras E ahora en esa bolsa, más aún cuando María Ariza, directora general de Biva, escribió en Twitter en ese mismo sentido.

     “Llegará a la Biva el primer Fibra E”, publicó en la red social Twitter Ariza sin detallar sus planes.

     El trámite también pone a la bolsa con menos de un año de operación un paso por delante del su rival, la BMV, en cuanto a la reactivación de las colocaciones en el mercado de capitales, al menos en cuanto a trámites públicos.

     Biva tiene en puerta, además de Fibra Infraestructura México, la colocación de Bricks Acquisition Company, una empresa que planea enfocarse en el sector inmobiliario estadounidense y que llegará al mercado en forma de compañía de adquisición con propósito especial (spac, por sus siglas en inglés).

     Quien también evalúa su llegada al mercado es EFM Capital, un fondo de inversión mexicano enfocado en empresas familiares, aunque no ha decidido mediante qué bolsa de valores.

     El mercado mexicano no ha recibido la venta de fibras desde que Fibra Storage, enfocada en minibodegas, hiciera lo propio en agosto de 2018. Por su parte, la última colocación de acciones fue efectuada por Promecap Acquisition Company, el primer spac en el país, hace 13 meses.

     Otras compañías mexicanas, como Banca Mifel o Coppel, han desistido de recabar recursos del mercado ante la volatilidad generada por la incertidumbre comercial, las elecciones y el resultante nuevo gobierno, lo que incluso se reflejó en el mercado de deuda. Ahora algunos creen que el momento álgido ya pasó.

     “Es un tema de oportunidades, cuando las veamos bien, creo que lo que nos da la autorización del programa es entender un poco las nuevas oportunidades y estar listos para cuando creamos que pueden existir los proyectos adecuados, nos da flexibilidad”, dijo vía telefónica sobre el programa aún no usado Alex Fabrega, encargado de relación con inversionistas de Fibra Infraestructura México.

     La fibra está indirectamente vinculada al fondo de inversión CKD Infraestructura México (CKD IM), puesto que ambas entidades cuentan con el mismo equipo directivo. CKD IM ha recabado fondos de inversionistas institucionales al vender Certificados de Capital de Desarrollo (CKDes) desde 2015, instrumentos que coexistirán y complementarán a las fibras.

     La compañía, que pretende cotizar con la clave FIIBRAMX, actualmente no cuenta con activos y no identifica en su prospecto un portafolio inicial a adquirir tras su primera colocación. La fibra plantea crear fideicomisos independientes con cada emisión que se dediquen a adquirir compañías mexicanas de un sector económico específico.

     “Es un programa maestro, nos permite tener distintos sectores dentro del mismo programa de fibras, operativamente son minifideicomisos porque cada uno tiene que estar diferenciado”, agregó Fabrega. “Lo que esto nos permite, dentro del mismo listado, es poder hacer colocaciones de industrias distintas, compartimentarlas y ofrecer perfiles distintos de inversión”.

     Entre las actividades en que la empresa centrará sus compras destacan el procesamiento, conversión, transporte y almacenamiento de petrolíferos o cualquier derivado del petróleo o gas natural --sin considerar comercialización o expendio--; generación, transmisión o distribución de energía eléctrica; y proyectos de inversión en infraestructura en asociación público-privada (carreteras, vías férreas, transporte, puertos, aeródromos, telecomunicaciones).

     Los principales directivos de la fibra serán Moisés Eduardo Ramos de la Cajiga (director general), que tiene más de 25 años de experiencia en banca de inversión y proyectos de infraestructura en Estados Unidos y América Latina; y Jorge Rodrigo Núñez López, que ha trabajado más de una década en financiamiento estructurado, análisis de inversiones y levantamiento de recursos públicos.

     “Consideramos que el conocimiento, experiencia y las fuertes relaciones de nuestro equipo de administración en el sector, nuestro efectivo modelo de negocios y nuestra inteligencia de mercado, nos proveerá de ventajas competitivas importantes para adquirir, consolidar, operar y promover los activos de las sociedades promovidas”, agregó Fibra Infraestructura México en su prospecto.

     El intermediario colocador registrado en el programa es Casa de Bolsa Multiva, no obstante, la compañía aclara que podrá cambiar en cada venta de títulos.